Además, en la COP25 las ONG dedicadas al cambio climático nos insultaron con premios fósiles. ¿No podrían al menos haber dicho que su empleador, China, merecía algo mejor?
06/02/2021
Lo siguiente es de "Henken Jizai" Corona Taught Me the Big Bad de Masayuki Takayama, publicado el 15/01/2021.
Al igual que sus trabajos anteriores, este libro es también uno de los mejores libros del mundo.
Es una lectura obligada, no sólo para los japoneses sino para todo el mundo.
Todos los ciudadanos japoneses deben acudir a su librería más cercana para adquirir un ejemplar ahora.
Le haré saber al resto del mundo todo lo posible.
Este capítulo es prueba 100% de la veracidad de esta columna, que se refiere a que el calentamiento global es una trampa tendida por China y la estupidez del mundo cayendo en ella.
El gobierno y el pueblo japonés, los medios como Asahi y NHK, los gobiernos y los medios de otros países del mundo y aquellos que viven en la ONU deben leer este artículo para tenerlo en cuenta.
Todos deberían sentir una vergüenza tan insoportable que pensarían: "¡Me da tanta vergüenza que podría morir!".
El énfasis en el texto aparte del título es mío.
Las revelaciones de Koizumi Shinjiro sobre la AOD de China
El aire en China está sucio.
Es una mezcla de hollín, gases de escape y las temidas PM2,5.
Lo terrible de los chinos es que pensaban que esa suciedad podría usarse para ganar dinero.
Por eso China se ha asociado con un estafador canadiense, Maurice Strong", escribió Watanabe Soki en el Sankei Shimbun el otro día.
Primero difundieron la teoría de que la causa del cambio climático, incluido el reciente invierno anormalmente cálido, era "una concentración demasiado alta de CO2".
Se ha vuelto tan concentrado porque "los países industrializados como Japón lo han estado emitiendo durante muchos años", por lo que deberían reducir sus emisiones.
Deberían comprar derechos de emisión de C02 a los países menos desarrollados si no pueden reducir sus emisiones.
Sin embargo, China, que actualmente produce la mayor cantidad de C02, no fue considerada responsable porque es un "país menos desarrollado".
Con el apoyo de China, Strong se convirtió en Secretario General de la Cumbre de la Tierra de Río y difundió la historia fraudulenta en nombre de las Naciones Unidas.
Las ONG chinas se convirtieron en sus peones.
Japón, débil ante la ONU, fue fácilmente engañado y pagó a China 100.000 millones de yenes al año en créditos de emisión.
Recientemente, se ha revelado la verdadera identidad de Strong y la comunidad biológica ha advertido que mayores reducciones de CO2 matarán a las plantas que dependen de él para alimentarse.
China, sintiéndose agraviada, ha tratado de sacar a relucir a la chica del cambio climático, Greta Thunberg, para ver si funciona.
Hubo otra estafa internacional de este tipo en los años 1990.
La estafadora fue Clare Short, directora de la Agencia Británica para el Desarrollo Internacional.
La víctima también era japonesa.
El escenario era un país subsahariano donde el VIH era entonces una epidemia importante.
Los pacientes llegaron uno tras otro a Gran Bretaña, Francia y otros antiguos países soberanos en busca de buena atención médica.
Los gastos sociales y médicos del Reino Unido y Francia se estaban quedando sin dinero.
Querían eliminar a los refugiados del VIH, pero eso los haría parecer seres humanos.
Pensó Claire.
¿Qué pasaría si los países desarrollados perdonaran los préstamos de ayuda pagados que habían concedido a los países subsaharianos?
Los países pobres podrían utilizar el dinero que se suponía debían devolver para construir hospitales locales.
Ya no tienen más dificultades para ir al Reino Unido.
Es una historia hermosa, pero la cantidad de ayuda del Reino Unido es cero.
El mayor donante fue Japón, que aportó 1 billón de dólares.
Si quisiera igualarlo, se habría inclinado ante Japón, pero dijo todo lo contrario: "Japón es una ayuda para un proxeneta, una misericordia que se aprovecha de los países más pobres. Japón es un dinosaurio despiadado que se aprovecha de los países más pobres". .
Hay que reconocer que el proxenetismo representó sólo el 10% del monto total en campos especializados como la medicina.
No era más que una acusación, pero fue difundida por Jubilee 2000, una ONG apoyada por Gran Bretaña.
En Japón, la Iglesia Católica de Tokio y el Asahi Shimbun difundieron mentiras sobre "apoyarse en los débiles" y otras mentiras de Clare Short.
Al final, Japón decidió abandonar un total de 6 billones de yenes en ayuda, incluida la ayuda pagada, que debía expirar en 10 años a partir de 2003, y al mismo tiempo decidió abolir la llamada ayuda al proxeneta.
El Reino Unido, por otro lado, construyó un hospital en la región con la deuda que Japón había perdonado, desempeñando el papel de una antigua nación soberana que atendía a los débiles y evitaba los refugiados médicos.
Hablando de estar cerca de los débiles, Japón tiene su propio Koizumi Shinjiro.
Tan pronto como asumió el cargo de Ministro de Medio Ambiente, apoyó a los pescadores de Fukushima y dijo: "No liberaremos tritio, incluso si es inofensivo.
Los pescadores obtienen derechos de pesca gratuitamente del gobierno.
Podrían rescindirlo o comprarlo directamente.
No parecen estar dispuestos a crear resentimientos.
Además, en la COP25, las ONG dedicadas al cambio climático nos insultaron con premios fósiles.
¿No podría haber dicho algo más apropiado?apropiado para su empleador, China?
El otro día, Shinjiro, que siempre está equivocado, se quejó inusualmente ruidosamente de haber ayudado a Vietnam a construir una central térmica.
Simplemente fue un buen chico al decir que no permitiría la exportación de centrales térmicas que emiten C02, pero luego hizo una simple pregunta: "¿Por qué todos los pedidos para la construcción de estas centrales térmicas provienen de China?"
De hecho, después de que Japón dejó de proxenetismo, la mayor parte del casi billón de yenes en AOD concedido cada año se ha destinado a China.
Hemos dado billones de yenes en AOD a China y le hemos comprado créditos de emisiones de C02.
Además de eso, China ha estado utilizando dinero japonés para enviar ciudadanos chinos al extranjero para implementar la ayuda.
La prosperidad de China floreció gracias a la estupidez de Japón.
Ya hemos tenido suficiente de China.
No permitiremos que nadie nos llame más idiotas si podemos aceptar que Shinjiro ha dejado claro su punto, recuperar el proxenetismo y revivir las centrales nucleares que no emiten C02. (Edición del 20 de febrero de 2020)
