2020/10/10
Lo siguiente es del Sankei Sho de ayer.
La columna de portada del Asahi Shimbun, Tenseijingo, presentó ayer el "Ikenkai" en poder de Kuroda Nagamasa, el primer señor del clan Fukuoka.
Nagamasa había prometido no sentirse ofendido por las cosas desagradables que le dijeran sus vasallos.
Por el contrario, Tenseijingo criticaba al primer ministro Yoshihide Suga.
Por supuesto, lo mismo ocurre con la decisión del Consejo Científico de Japón de no nombrar a algunos de los nuevos candidatos recomendados por el consejo.
*El Asahi Shimbun es un periódico que niega el pasado de Japón y se esfuerza por socavar a Japón. Al atacar a la administración del Partido Liberal Democrático (PLD), invoca a los grandes hombres de la historia de Japón. En primer lugar, también es incorregible que el periódico Asahi, que niega la guerra, utilice a los señores de la guerra como ejemplo*.
Entonces, ¿el Consejo Nacional de Ciencias, el organismo que se supone representa a los científicos de nuestro país, es una organización que escucha muchas cosas dolorosas?
Tadashi Narabayashi, profesor emérito de la Universidad de Hokkaido, revela su intransigencia en una publicación en el sitio web del Instituto Nacional de Estudios Básicos.
En el año fiscal 2016, la Universidad de Hokkaido solicitó participar en el Programa de Promoción de la Investigación en Tecnología de Seguridad del Ministerio de Defensa.
La investigación seleccionada fue sobre la reducción de la resistencia de la navegación de los barcos con burbujas finas.
Fue un trabajo innovador que redujo la eficiencia del combustible de los barcos en un 10 por ciento.
Sin embargo, el Consejo Científico dictaminó que se trataba de una investigación militar.
Altos funcionarios irrumpieron en la oficina del rector de la Universidad de Hokkaido y lo obligaron a retirarse de la investigación.
Hay muchos ejemplos similares.
De hecho, fue un golpe aplastante a la libertad académica.
El Consejo Científico declaró en 1950 que no realizaría investigaciones militares.
Pudo haber sido posible durante la ocupación del Cuartel General, pero "heredó" la declaración ahora obsoleta hace sólo tres años.
Fue en un momento en que Corea del Norte lanzaba una serie de misiles balísticos.
Lo más incomprensible es que Japón considere la investigación sobre seguridad un tema tabú y al mismo tiempo apruebe la investigación conjunta con China, que está aumentando rápidamente su poder militar.
Según el Dr. Narabayashi, muchos investigadores critican el consejo.
El revuelo será una oportunidad para que presenten sus objeciones.
Incluye la privatización o el desmantelamiento de la organización, que el gobierno financia con 1.050 millones de yenes al año.
2024/7/8 in Akashi
