Dios Todopoderoso es mi salvador

Que el amor y la misericordia de DIOS estén siempre contigo

Reflexión del evangelio de hoy: ¿Por qué Dios no responde mis oraciones?

2020-03-23 22:28:47 | Películas Evangélicas
Reflexión del evangelio de hoy: ¿Por qué Dios no responde mis oraciones?
¡Hola, hermanos y hermanas de la etapa amorosa! Recientemente, a menudo me he enojado por algunas cosas sin razón en casa. Cuando descubrí que mi esposo y mi hijo cometían muchos errores, recé al Señor y le pedí que mantuviera mi corazón en silencio y cambiara sus errores. Pero, ¿por qué no recibo respuesta del Señor? –Hanxiao
Hermana Hanxiao, no enfades. Sobre esta cuestión, creo que la razón principal es que no entendemos los principios de la oración. Es un hecho, muchas veces cuando rezamos al Señor, simplemente decimos los que deseamos pedirle. Pensamos que rezamos, pero no sabemos si dicha oración es agradable al Señor. Al igual que la forma en que contactamos a los demás: si queremos hablar con alguien, primero tenemos que tener algún conocimiento de él antes de saber cómo comunicarnos con normalidad con él. De lo contrario, una charla inútil o introvertida es muy probable que sea contraproducente. En realidad, hay tres aspectos principales en una verdadera oración. Mientras hagamos más esfuerzo en estos aspectos y recemos según estos aspectos, seguramente recibiremos la respuesta del Señor.
Primero, al orar, debemos buscar la voluntad de Dios en las palabras de Dios.
Colosenses 3:16 dice: "Que la palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros, con toda sabiduría enseñándoos y amonestándoos unos a otros con salmos, himnos y canciones espirituales, cantando a Dios con acción de gracias en vuestros corazones". Lo más importante para los que seguimos al Señor es centrar nuestros esfuerzos en las palabras de Dios, y leerlas con nuestros corazones. Cuando conocemos los requisitos de Dios sobre nosotros y la voluntad de Dios en todos los asuntos, debemos practicar y orar de acuerdo con Sus propósitos. Solo de esta manera nuestra oración puede ser escuchada por el Señor. Si hacemos una oración inútil, sin sentido o una oración informal, el Señor no la escuchará. Así como hablamos con una persona a la que se tiene en gran estima, debemos entender sus pensamientos antes de comunicarnos con él, pero no hablar con él solo de acuerdo con nuestros propios pensamientos. Entonces, si tememos a Dios, nuestra oración debería basarse en la comprensión de las palabras de Dios. Es decir, debemos buscar la voluntad de Dios y lo que Él realmente quiere lograr en nosotros a partir de la situación y las dificultades que encontramos. Cuando comprendamos Sus intenciones en Sus palabras y luego le oremos, Él escuchará nuestra oración. Tal como dice la Biblia: "Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas" (Mateo 6:33).
Segundo, cuando oramos, necesitamos usar nuestro corazón e integridad para adorar a Dios.
 

Juan 4: 23-24: "Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que le adoren. Dios es espíritu, y los que le adoran deben adorarle en espíritu y en verdad". También esto es muy importante. Si queremos que nuestras oraciones sean aprobadas por el Señor, debemos tener un corazón sincero y mantener nuestros corazones de antemano en tranquilo. Solo de esta manera, podemos orar de acuerdo a lo que Él quiere realmente lograr de nosotros y así su voluntad actuará en nosotros. De esta manera, recibiremos fácilmente la respuesta del Señor. Esta es una forma de adorar a Dios en espíritu y en verdad.
Cuando oramos, debemos buscar cómo hablar razonablemente, no decir palabras vacías, ni grandiosas palabras, o exigirle a Dios cosas como si Él tuviera deudas con nosotros. Este tipo de oraciones no pueden recibir la respuesta de Dios. Si nuestras oraciones se basan en palabras para agradar al Señor es que no conocemos Su voluntad, debemos hablar con Dios desde nuestro corazón, sin ocultar nuestros pensamientos; deberíamos tener un corazón obediente y de búsqueda, pero no deberíamos pedirle a Dios que cambie nuestra vida cotidiana. De esta manera, nuestra oración puede obtener la respuesta del Señor fácilmente. Él nos iluminará y nos guiará para conocer Su voluntad en las cosas que conocemos, porque ve que nuestro corazón es sincero.
Tercero, debemos tener fe en el Señor porque hay un tiempo para Su iluminación.
En realidad, la respuesta de Dios a nuestras oraciones generalmente no se basa en nuestro pensamiento. La sabiduría de Dios no puede ser sondeada por nosotros. A veces, después de orar al Señor, Él nos guiará para que conozcamos inmediatamente Su voluntad y nuestras dificultades serán resueltas. Pero a veces, cuando nos encontramos con algo que no podemos entender completamente y no sabemos qué hacer, después de rezar la respuesta del Señor la recibiremos en uno o varios días. Por lo tanto, hasta que recibamos Su respuesta, no debemos desanimarnos y debemos seguir orando al Señor para buscar Su voluntad. De hecho, muchas veces Dios usa este método para probar si tenemos fe en Él. Así como Dios dice: "Si no entiendes, no seas impaciente por los resultados rápidos. No es que no te diré; quiero ver si confías en Mí cuando estás en Mi presencia y si dependes de Mí con confianza".
Hermana Hanxiao, permítame compartir mi experiencia reciente con usted. También perdí los estribos sin razón en mi casa y me enfoqué en los fallos de mi esposo. Pensé que estaba ocupado con mi trabajo todo el día, y mi esposo no se preocupaba por mí y tampoco me ayudaba en las tareas domésticas, así que estaba muy enfadada. Más tarde, oré al Señor, "¡Oh Señor! No sé lo que me estás enseñando en este entorno, y qué verdades debo vivir. Estoy enfadada, y lo que veo son todos los errores de mi marido. ¿Qué debo hacer? Señor, por favor ilumíname. Estoy dispuesta a proceder de acuerdo con Tus deseos". Después de mi oración, pensé en las palabras del Señor Jesús: "¿Y por qué miras la mota que está en el ojo de tu hermano, y no te das cuenta de la viga que está en tu propio ojo?" (Mateo 7: 3). "Porque si perdonáis a los hombres sus transgresiones, también vuestro Padre celestial os perdonará a vosotros" (Mateo 6:14). De repente me di cuenta: a Dios no le gusta que me concentre en las faltas de mi esposo, sino que me pide que aprenda a conocer mi falta y me abstenga y perdone a los demás. Pero fijé mi mirada en mi esposo, pensando que él actuaba mal a cuidarme muy poco. Por lo tanto, he vivido engañando por Satanás. En realidad, mi esposo también está cansado debido a que trabaja horas extras. Sólo quiero que se preocupe por mí en lugar de pensar en cómo cuidarlo. Este pensamiento es proviene de la naturaleza egoísta de Satanás. Después de saber esto, hice una oración de sumisión a Dios, "¡Oh Señor! Ahora entiendo que no fue culpa de mi esposo sino de mi culpa, y que no fui razonable al pedirle y demandarle demasiadas cosas a él. Estoy dispuesta a actuar de acuerdo con Tu voluntad, tolerarlo y no encontrarle defectos. Puedes darme fe y fuerza para practicar la verdad". Sorprendentemente, después de orar así, tuve confianza para tolerar a mi esposo y el enojo, queja y el descontento desaparecieron. Finalmente sé que una verdadera oración nacida de las palabras del Señor es muy importante.
Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.

¿Con qué intención el Señor Jesús realizó el milagro de los cinco panes y dos pescados?

2020-03-23 21:58:03 | Películas Evangélicas
¿Con qué intención el Señor Jesús realizó el milagro de los cinco panes y dos pescados?
Querido hermano Xiangyin,
Hace ya dos años que no nos vemos. ¿Está todo bien? Desde que me predicó el evangelio del Señor Jesús hace dos años, he estado estudiando devotamente la Biblia y asistiendo a reuniones según un cronograma y siento que he logrado algunos resultados. Especialmente respecto el versículo que leí recientemente sobre el Señor alimentando a cinco mil personas con cinco panes y dos peces. Puedo ver la autoridad y el poder único de Dios, lo que aumenta mi fe en Dios y me hace creer más firmemente que el Señor en quien creo es el único Dios verdadero. Sin embargo, al reflexionar sobre esto, me pregunto: ¿el propósito del Señor Jesús al realizar este milagro fue sólo que podamos ver la autoridad de Dios? Las obras que Dios realiza contienen Su intención, así que este milagro debe guardar una verdad. Entonces, la busqué entre los hermanos y hermanas a mi alrededor, pero ninguno de ellos me brindó una respuesta satisfactoria. Hoy, le escribo para preguntarle si tiene nuevas ideas al respecto. De ser así, por favor escríbame para que podamos aprender el uno del otro.
Quedo a la espera de su respuesta.
Su hermano en el Señor, Yi’en
1 de Marzo de 2018
Respuesta:
Querido hermano Yi’en,
Me alegra haber recibido tu carta. Son dos años desde la última vez que nos vimos y te extraño mucho. Gracias a la compañía del Señor, todo está bien, así que no te preocupes por mí. Durante estos dos años he seguido dedicandome a hacer servicio en la iglesia y he experimentado muchas veces la guía del Señor. ¡Gracias al Señor! Por tu pregunta puedo ver tu crecimiento de vida. Buscas seriamente la verdad y esa es realmente la bendición del Señor. El Señor dijo: “Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá” (Lucas 11:10). Que el Señor dirija nuestra comunicación esta vez para que podamos entender más Su voluntad.
Primero, leamos Juan 6:10-13: “Jesús dijo: ‘Haced que la gente se recueste’. Y había mucha hierba en aquel lugar. Así que los hombres se recostaron, en número de unos cinco mil. Entonces Jesús tomó los panes, y habiendo dado gracias, los repartió a los que estaban recostados; y lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que querían. Cuando se saciaron, dijo a sus discípulos: ‘Recoged los pedazos que sobran, para que no se pierda nada’. Los recogieron, pues, y llenaron doce cestas con los pedazos de los cinco panes de cebada que sobraron a los que habían comido”.
Con este milagro se puede observar definitivamente que el Señor Jesús posee la autoridad única y que Él es omnipotente. Esta es una prueba más de la identidad y el estatus del Señor Jesús quien era Dios encarnado. Pero, ¿qué pensamientos del Señor Jesús en realidad estaban contenidos dentro del milagro? Una vez leí varios pasajes de un libro que son útiles para que comprendamos esta pregunta.
Las palabras decían: “Cuando el Señor Jesús vio a estas cinco mil personas, estaban hambrientas y sólo podían pensar en comer hasta saciarse, y por ello fue en este contexto donde Él satisfizo sus deseos. ¿Qué había en Su corazón cuando lo hizo? ¿Cuál fue Su actitud hacia estas personas que sólo querían comer hasta saciarse? En este momento, los pensamientos del Señor Jesús y Su actitud tenían que ver con el carácter y la esencia de Dios. Frente a estas cinco mil personas con el estómago vacío, quienes sólo querían comer una buena comida; frente a estas personas llenas de curiosidad y esperanzas sobre Él, el Señor Jesús sólo pensó en utilizar este milagro para concederles gracia. Sin embargo, no depositó Sus esperanzas en que se convirtieran en Sus seguidores, porque sabía que sólo querían participar en la diversión y comer hasta saciarse. Así pues, lo hizo lo mejor que pudo con lo que tenía allí, y usó cinco hogazas de pan y dos peces para alimentar a cinco mil personas. Abrió los ojos de estas personas que disfrutaban del entretenimiento, que querían ver milagros, y que vieron con sus propios ojos las cosas que el Dios encarnado podía completar. […] Aunque estas personas no sabían quién era Él ni lo entendían, ni tenían una impresión particular de Él ni gratitud hacia Él aun después de haber comido los panes y los peces, Dios no lo censuraría; les proporcionó una maravillosa oportunidad de disfrutar de Su gracia”.
“¿Puso entonces algunas exigencias a estas personas? ¿Hubo odio? No hubo nada de eso; simplemente no quería prestar más atención a estas personas que no podían seguirle, y en ese momento Su corazón estaba dolido. Como había visto la depravación de la humanidad y había sentido su rechazo hacia Él, al ver a estas personas o estar con ellas, su torpeza y su ignorancia lo entristecieron mucho y afligieron Su corazón. Por ello sólo quería apartarse de ellas cuanto antes. El Señor no tenía exigencias para ellas en Su corazón; no quería prestarles atención, y sobre todo no quería gastar Sus energías con ellos. Sabía que no podían seguirle; a pesar de ello, Su actitud hacia ellos seguía siendo muy clara. Sólo quería tratarlos con bondad, concederles la gracia; esta era la actitud de Dios hacia toda criatura bajo Su dominio: para todas ellas, un trato bondadoso, provisión y alimentarlas. El Señor Jesús reveló, de forma muy natural, la propia esencia de Dios y trató con bondad a estas personas, porque era Dios encarnado. Lo hizo con un corazón de misericordia y tolerancia”. De estas palabras, vemos que las cinco mil personas que comieron hasta saciarse no seguían verdaderamente al Señor, ni buscaban conocerlo. Solo querían satisfacer su curiosidad después de escuchar sobre los milagros realizados por el Señor Jesús. Él sabía que después de comer hasta saciarse no se convertirían en Sus verdaderos seguidores, y en lugar de detestarlos, rechazarlos o no brindarles alimento, el Señor Jesús los trató amablemente. Trató a los que estaban lejos de Él con el corazón lleno de misericordia. Así podemos observar que la esencia de Dios es amor. Independientemente de si la gente lo sigue o no, Dios está lleno de misericordia y gracia para ellos, dándoles comida para que sobrevivan en el mundo creado por Él.
Además, este milagro nos permite ver que el corazón del Señor Jesús estaba sufriendo. Cuando estuvo entre aquellos que comían hasta saciarse, ninguno pudo entender la voluntad del Señor ni conocer la voz de Su corazón. Todos ellos solo querían ver Su poder y pedirle gracia. El Señor Jesús había visto la miseria y depravación del hombre, y sentido el rechazo del hombre hacia Él. En ese momento, su corazón estaba extremadamente dolorido. Por ello no quería quedarse allí, ni decir más palabras o expresarles 
la voluntad de Dios como lo hizo con sus discípulos, quienes realmente lo seguían. Entonces, inmediatamente después de que estas personas comieron hasta saciarse, el Señor Jesús se fue, llevando solo el dolor que la humanidad le había causado. Estos son los pensamientos del Señor Jesús que podemos ver.
Estas cinco mil personas fueron las que sólo buscaban comer hasta saciarse. Entonces, entre nosotros que seguimos al Señor hoy, ¿hay personas que sólo buscan comer hasta saciarse? Después de observar de cerca, descubriremos que también existen muchos entre nosotros los creyentes en el Señor. Algunos consideran creer en el Señor como un sustento espiritual y lo usan para llenar su vacío espiritual. Algunos otros creen en el Señor solo para recibir la gracia de Él, para que puedan trabajar sin problemas, para que su familia esté segura, y así sucesivamente. Algunos leen
la Biblia todos los días pero nunca cumplen con las palabras del Señor en la práctica; solo quieren seguir al Señor como antes, deseando irracionalmente la vida eterna y la entrada al reino celestial. ¿Estas personas no son acaso como las que se comen hasta saciarse y confían en la gracia para la salvación? ¿Podría tal fe en el Señor recibir su encomio? ¿Son diferentes de las cinco mil personas alimentadas por el Señor Jesús?
Entonces, ¿por qué el Señor Jesús les dijo tantas palabras a los discípulos que lo seguían en ese momento? Esto fue porque la mayoría de ellos realmente seguía y buscaba conocer al Señor. En especial el Apóstol Pedro, que fue un modelo y pionero de cómo amar a Dios. Prestó atención a las palabras del Señor Jesús, conoció sus propias deficiencias en las palabras del Señor y buscó su propia entrada. De esta manera, obtuvo más iluminación de Dios, entendió más verdades, se convirtió en el que obedeció a Dios, conoció a Dios y amó a Dios, y finalmente fue crucificado boca abajo por su amor a Dios. Por eso el Señor fijó especialmente sus ojos en Pedro, le confió su rebaño para pastorear y le entregó la llave del reino celestial a Pedro. A partir de esto podemos ver que aquellos que verdaderamente creen en Dios y persiguen la verdad pueden recibir Su gracia, verdad y vida. Mientras que aquellos que sólo buscan saciarse, podrán recibir algo de gracia por la misericordia de Dios pero no Su encomienda. Ya que ellos no aman la verdad en absoluto, ni buscan conocer o amar a Dios, eventualmente tales personas no ganarán la verdad ni la vida. Así pues, se entiende que Dios es justo con todas las personas, y esto se decide por Su justicia. Entonces, si queremos obtener la encomienda del Señor, entonces no podemos sólo contentarnos con comer hasta saciarnos y creer en Dios, o estar deseosos de conocerlo, sino que debemos confiarle nuestro corazón, y esforzarnos más en comprender y practicar Sus palabras. Si lo hacemos continuamente, Dios seguramente nos guiará a obtener más.
Hermano Yi'en, ¿podría tal confraternidad ayudarlo a comprender la pequeña intención de Dios detrás del milagro de los cinco panes y los dos peces?
Hermano en el señor, Xiangyin
16 de marzo de 2018
Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.
(Traducido del original en inglés al español por Silvia Casas Bustamante)

Música cristiana 2020 | Dios desciende con juicio

2020-03-23 02:25:38 | Películas Evangélicas
Música cristiana 2020 | Dios desciende con juicio
Hoy, Dios no sólo está descendiendo sobre la nación del gran dragón rojo,
sino que también está volviendo Su rostro hacia todo el universo,
de forma que todo el empíreo tiembla.
¿Existe un solo lugar que no se someta a Su juicio?
¿Hay un solo lugar que no exista bajo los azotes que Él lanza?
Dondequiera que va, ha esparcido semillas de todo tipo de desastre.
Esta es una de las formas en que obra y es,
sin duda, un acto de
salvación para el hombre;
lo que le extiende sigue siendo un tipo de amor.
Dios desea hacer que incluso más personas lleguen a conocerle, puedan verle y,
de esta forma, lleguen a venerarlo a Él, a quien no han visto durante tantos años,
pero que hoy es práctico.
Dios desea hacer que incluso más personas lleguen a conocerle, puedan verle y,
de esta forma, lleguen a venerarlo a Él, a quien no han visto durante tantos años,
pero que hoy es práctico,
pero que hoy es práctico, es práctico.
De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”
Recomendación:  El Juicio Final