Dios Todopoderoso es mi salvador

Que el amor y la misericordia de DIOS estén siempre contigo

La protección de Dios: La historia interna de que estuve muy cerca de la muerte

2019-12-17 23:02:24 | Profecías Bíblicas

Inesperadamente casi me convierto en un vegetal

Una mañana, alrededor de las ocho en punto, mi mujer y yo llevamos a nuestra nieta de 7 años a que nos ayudase a recoger leña y transportarla a casa en nuestra carretilla tirada a mano. Llenamos el carro hasta arriba de leña de varios centímetros de grosor, y entonces, alrededor de las diez, mi mujer y yo la estábamos arrastrando a casa cuando nos topamos con una pendiente descendente donde empezamos a empujar el carro hacia atrás para que se moviese despacio. Pero el camino estaba muy inclinado y la carretilla estaba tomando mucha velocidad y empezaba a precipitarse cuesta abajo; mi mujer y yo intentamos detenerla con todas nuestras fuerzas. Tenía tanto miedo que me parecía que el corazón se me iba a salir del pecho al pensar que nuestra nieta estaba todavía en la carretilla. ¡Esperaba con todas mis fuerzas que no se volcase! Si se precipitaba cuesta abajo y se volcaba, estaríamos todos acabados. En medio de esta emergencia, clamé en mi corazón urgentemente: “¡Oh, Dios! Por favor, sálvanos….” La carretilla estaba bajando demasiado deprisa y mi mujer no podía correr tan rápido; se le escapó el mango y tuvo que hacerse a un lado, y yo me quedé atrapado entre los mangos y no me podía escapar. Entonces caí a la fuerza, aplastado debajo de la carretilla y estaba siendo arrastrado con ella. Clamé a Dios urgentemente: “¡Dios, por favor, sálvame! Sálvame….” Mi mujer estaba justo detrás persiguiendo la carretilla mientras gritaba: “Dios, salva a mi marido y a mi nieta….” Fui arrastrado 20 metros antes de que la carretilla se volcase de repente en una pila de leña en una cuneta. Mi nieta fue lanzada al lado de la pila, y afortunadamente esto evitó que cayese en una zanja con agua debajo. Sólo tenía un pequeño rasguño en un lado de la boca que sangraba un poco. Sin embargo, yo había sido arrastrado debajo de la carretilla y aplastado gravemente. Estaba enroscado como una pelota con la cabeza y las piernas juntas. Estaba sufriendo mucho. Quería levantar la cabeza, pero no podía mover el cuello en absoluto, y mi espalda estaba completamente inmovilizada. Sentía un dolor insoportable, tanto que no me podía ni mover.

 

Mi mujer se apresuró a ver cómo estaba nuestra nieta y sólo la escuché llorar y decir: “Abuela, estoy bien, por favor, ve a ver cómo está el abuelo.” Yo dije débilmente: “Siento como si se me hubieran roto todos los huesos del cuerpo. No me encuentro nada bien; intenta moverme la cabeza.” Al ver que todavía podía hablar, mi mujer lloraba mientras me enderezaba la cabeza. Nuestra nieta también vino corriendo, llorando mientras me llamaba, pero yo estaba demasiado débil y tenía demasiado dolor como para responder. Respiraba con dificultad. Estaba orando a Dios en mi corazón: “Oh, Dios, siento un dolor increíble ahora mismo y no voy a poder soportarlo mucho más. No sé cuánto más voy a durar. ¿Voy a morir?” Entonces, pensé en estas palabras de Dios: “Dios Todopoderoso, la Cabeza de todas las cosas, ejerce Su poder real desde Su trono. Él gobierna sobre el universo y sobre todas las cosas y nos está guiando en toda la tierra. Con frecuencia estaremos cerca de Él, […] Si aún tienes aunque sea un aliento de vida, Dios no te dejará morir”. Las palabras de Dios me dieron fe y fuerzas; el universo entero y todas las cosas están al alcance de Su mano, entonces, ¿no está mi vida también en Sus manos? Entonces pude confiar en Dios y tener esperanza desde dentro de mi corazón. Después de esto me llevaron al hospital y vinieron mi hijo y su mujer. El médico les dijo a mis familiares: “El paciente ha sufrido lesiones muy graves. Tiene más de 20 fracturas en las costillas, la columna cervical y la columna lumbar. Se quedará paralizado o se quedará como un vegetal, y hay incluso un riesgo de que muera. Deben estar preparados”.

Esa tarde mi mujer me dijo lo que había dicho el médico. Esto era muy triste, y pensé: “Si de verdad me quedase paralizado o me quedase como un vegetal, ¿no sería esa una vida de sufrimiento únicamente? ¿Seguiría teniendo sentido la vida?” No pude evitar llorar y llorar cuando pensé en esto. En ese momento, sintiendo la desesperación en mi corazón, junto con el dolor en mi cuerpo, pensé que sería mejor estar muerto; mi sufrimiento llegó a un punto crítico. Justo entonces oré a Dios: “Dios, ahora estoy sufriendo mucho dolor. Lo que el médico ha dicho me ha dejado sintiendo mucho miedo. Dios, por favor, guíame para tener fe y valor para afrontar todo esto.” Esa noche mi sufrimiento se cernió sobre mí como una nube oscura y no pude dormir. Entonces, en la noche, pensé en estas palabras de Dios: “De todo lo que acontece en el universo, no hay nada en lo que Yo no tenga la última palabra. ¿Qué existe que no esté en Mis manos?” “¿A quién en toda la humanidad no cuidan los ojos del Todopoderoso? ¿Quién no vive en medio de la predestinación del Todopoderoso? ¿El nacimiento y la muerte de quién vienen de sus propias elecciones? ¿Controla el hombre su propio destino?” Estas palabras de Dios revelan un misterio. El universo entero y todas las cosas están bajo el control de Dios, y nuestras vidas están en manos de Dios. Independientemente de si me quedo paralizado o me convierto en un vegetal, sin importar si vivo o muero, todo está gestionado por Dios. Las palabras de Dios me dieron fe y fuerzas y me dieron algo en lo que apoyarme en mi corazón.

Mientras dormía en la cama del hospital, mi cuerpo entero estaba envuelto en vendas y tenía un gotero en el brazo. No podía moverme para nada. Mi mujer estaba a mi lado, cuidándome día y noche, dándome la medicación y la comida. Cuando veía que lo estaba pasando mal, hacía que yo orase a Dios y confiase en Él; oraba constantemente día tras día. Un día, pensé en las pruebas por las que pasó Job. Perdió mucho ganado y a sus propios hijos, y su cuerpo se quedó cubierto de forúnculos. Se sentó en las cenizas rascándose los forúnculos con un trozo roto de cerámica. Incluso cuando sufrió golpes físicos y psicológicos al mismo tiempo, aun así, no perdió la fe ni rechazó a Dios. Ese fue un testimonio rotundo. Como dice la palabra de Dios: “Lo valioso de Job residía en que siguió pronunciando esas palabras aun siendo tentado, y cuando todo su cuerpo estuvo cubierto de llagas, cuando soportó el mayor tormento […], él creía en su corazón que, independientemente de las tentaciones, o de lo dolorosas que fueran las tribulaciones o el tormento, aunque la muerte tuviera que venir sobre él, no renunciaría a Dios ni rechazaría el camino de temer a Dios y apartarse del mal. Ves, pues, que Dios ocupaba el lugar más importante en su corazón, y que en este sólo estaba Él. Por esto leemos en las Escrituras descripciones suyas como: ‘En todo esto Job no pecó con sus labios’”. Entonces, decidí en mi corazón en silencio que deseaba seguir el ejemplo de Job. Sin importar lo que tuviese que afrontar con mi salud en el futuro, siempre que tuviese aliento que tomar, confiaría en las palabras de Dios en mi vida. Desde entonces, me centré en estar en silencio ante Dios y reflexionar sobre las palabras de Dios todos los días; frecuentemente oraba a Dios acerca de mi estado y se lo confiaba a Él. Estaba dispuesto a apoyarme en Dios y someterme a Su dominio y Sus arreglos.

Dado de alta a los 28 días por milagro

Cuando le confié todo esto a Dios, ocurrió un milagro. Alrededor de las 9 de la mañana del octavo día después del accidente, algunos médicos y enfermeras vinieron para hacer una consulta y me preguntaron: “¿Cómo se encuentra?” Yo contesté: “No siento tanto dolor y ya vuelvo a comer” Ellos pensaron que era bastante extraño, así que un médico dijo: “Señor, nunca imaginamos que se recuperaría tan bien. Hemos tenido pacientes como usted, y ninguno de ellos se ha recuperado, pero su estado ha ido mejorando gradualmente. ¡Es increíble! ¡Basándonos en su estado actual, ninguna de las tres posibilidades que mencionamos antes (parálisis, quedarse como un vegetal o la muerte) tiene probabilidades de ocurrir!” No pude evitar llorar cuando escuché al médico decir esto. Sentí gratitud, culpa y alegría. Oré a Dios de corazón: “Dios, te doy gracias. Eres Tú quien me ha cuidado y protegido. Si no fuera por Tus hechos maravillosos, con mis huesos rotos en 20 sitios, según lo que los médicos dijeron, debería haber quedado paralizado, como un vegetal, o en el peor de los casos, podría haber muerto. Pero nada de eso ha ocurrido. Si no fuese por Tu misericordia, ¿cómo podría ni tan siquiera seguir viviendo? Te doy mis gracias y mi alabanza sinceras; me has dado una segunda oportunidad en la vida. Oh, Dios, te doy gracias y te alabo”.

Después de la oración, pensé en las palabras de Dios: “Cuando las aguas se tragan totalmente al hombre, Yo lo salvo de las aguas estancadas y le doy una oportunidad de tener una nueva vida. Cuando los hombres pierden su confianza para vivir, Yo tiro de ellos desde el filo de la muerte, concediéndoles la valentía para vivir, para que me tomen como el fundamento de su existencia. […] Cuántas veces han visto Mis manos las personas; cuántas veces han visto Mi rostro amable, Mi faz sonriente; [...] Aunque la humanidad nunca me ha conocido, no aprovecho su debilidad para crear problemas innecesarios. Experimentando las dificultades de la humanidad, simpatizo por tanto con la debilidad del hombre”. A partir de estas palabras de Dios, me di cuenta de que la esencia de Dios es amor. Cuando estaba débil y sufriendo, Dios me dio fe y valor, y fue la mano de Dios la que me protegió milagrosamente y así me permitió seguir viviendo. Al recordar cuando la carretilla se volcó, si se hubiese precipitado en la zanja, que era de un metro o así de profunda, quién sabe lo herida que habría resultado mi nieta, y eso podría haber sido mi final. Sin embargo, la carretilla se volcó justo al lado de la leña que un vecino había amontonado, y gracias a que este montón de leña estaba en el camino, mi nieta no fue arrojada en la zanja. Además, yo no fui arrastrado debajo de la carretilla durante mucho tiempo, botando como una pelota; de lo contrario no habría sobrevivido. Fue la mano benévola de Dios la que nos permitió, a mi nieta y a mi, escapar de este encontronazo con la muerte, y me sentí profundamente conmovido en el corazón. También sentí que estaba increíblemente endeudado con Dios. Se me ocurrió que nunca me había tomado en serio mi fe, que pensaba que siempre que tuviese a Dios en mi corazón, eso era suficiente. Había pensado que ir a reuniones me quitaría tiempo para trabajar y ganar dinero, así que casi nunca iba. Hermanos y hermanas compartieron conmigo muchas veces, instándome a no darle mucha importancia al dinero, a que debería estar satisfecho con tener comida en la mesa y ropa que llevar, y a que me centrase en la fe y en buscar la verdad. Sin embargo, no escuché lo que tenían que decir. Yo seguí haciendo las cosas a mi manera e intentando ganar más dinero. Pero, cuando estaba en peligro crítico, Dios no me trató como merecía por mi comportamiento rebelde, sino que me protegió y me permitió librarme de una buena. Era imposible que pudiese estar suficientemente agradecido por el amor de Dios por mí. Esto también me hizo darme cuenta de que, cuando me enfrento a una calamidad, el dinero no puede salvarme nunca; sólo Dios puede salvarme.

El noveno día después del accidente, el médico me quitó todas las vendas y el dolor era más leve cada día. A las 9 de la mañana del vigésimo día, más de diez médicos y enfermeras vinieron a verme, y uno de los médicos dijo: “Está mucho más animado y tiene mucho mejor aspecto también. Es un verdadero milagro que haya podido recuperarse tan rápidamente y tan bien, y que haya podido sobrevivir después de unas lesionas tan graves. Puede ser dado de alta en cualquier momento. Vuelva a casa y recupérese bien.” Sin embargo, mis hijos insistieron en que debía quedarme en el hospital más tiempo, así que me quedé ocho días más, y entonces, 28 días después de haber sido ingresado, empecé el trámite para el alta. Poco después de haber vuelto a casa, algunos hermanos y hermanas vinieron a verme. Compartieron la palabra sobre la verdad conmigo y me pidieron que leyese las palabras de Dios más para establecer una relación correcta con Dios, para orar a Dios y confiar en Dios en todas las cosas, y para practicar mi fe verdaderamente. Di gracias por el amor de Dios porque esta palabra de mis hermanos y hermanas me permitió entender mejor el amor y misericordia de Dios. Desde entonces, me recuperé en casa y también asistí a reuniones; empecé a vivir una vida normal en la iglesia

Un día leí estas palabras de Dios: “Y después está la mayoría de las personas, que encuentra sustento espiritual en Dios”. “Si las personas siguen aferrándose a tales formas de creencia, ¿cuál será la consecuencia para ellas? Con este tipo de creencia, ¿son capaces de acercarse aún más al cumplimiento de las exigencias de Dios? Todo lo contrario; debido a sus conceptos y fantasías, las personas se alejarán todavía más del camino de Dios, porque la dirección que buscan es la opuesta a la que Él requiere de ellas. […] ¡Sólo ganarás creencia en Dios si la enfocas como la cosa más grande de tu vida, más importante que la comida, la ropa o cualquier otra cosa!” Lo que estas palabras de Dios revelaban me dejó con un sentimiento de vergüenza y culpa; era exactamente el tipo de persona expuesto en las palabras de Dios. Estaba tratando la fe en Dios como algo para satisfacer mis propias necesidades espirituales, así que, cuando tenía una necesidad buscaba a Dios, pero cuando no tenía ninguna necesidad, simplemente dejaba a Dios a un lado, lo daba por sentado, como el mismo aire que respiro. Este tipo de perspectiva de fe no era una creencia en un Dios práctico, sino una creencia en un Dios vago. Básicamente, nunca podría haber obtenido la verdad con ese tipo de fe. Esta experiencia transformó verdaderamente mi perspectiva incorrecta de la fe que había tenido durante años; ya no consideré mi fe en Dios como algo para recibir apoyo espiritual y ya no estaba atado por el dinero. Estuve dispuesto a seguir las instrucciones de Dios y a tratar mi fe como la cosa más importante en mi vida a partir de entonces, tomando más tiempo para leer las palabras de Dios, practicar mi fe y buscar la verdad. Siempre que tenga comida en la mesa y ropa para vestirme estoy satisfecho. Ahora incluso puedo caminar, y cuando los vecinos me ven, todos dicen cosas como “Estabas tan malherido, nunca imaginé que saldrías de esta. ¡El Hombre Viejo en el Cielo te ha ayudado mucho!” Algunas personas dijeron también que era extremadamente afortunado, pero en el fondo sabía que era Dios que me estaba protegiendo y permitiéndome seguir viviendo. Esta es la única razón por la que estoy aquí hoy.



¿Es la Biblia inspirada por Dios? ¿Cuál es la verdad?

2019-12-16 21:04:36 | Profecías Bíblicas

Hablando de la Biblia, cada uno de nosotros muestra un gran respeto por ella. Durante miles de años, ningún otro libro puede ocupar su lugar sagrado en los corazones de nosotros, los cristianos. Desde que comenzamos a creer en el Señor, los pastores y los ancianos siempre nos han dicho: "La Biblia es el único estándar para nuestra creencia y nuestra vida, y cada palabra en la Biblia está inspirada por Dios, sin ningún error". Después, yo vi que 2 Timoteo 3:16 dice: "Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia". Entonces, creí aún más el dicho "La Biblia está dada por la inspiración de Dios".

Sin embargo, el otro día, cuando navegué en el chat grupal, encontré a un hermano que publicó: "¿El punto de vista 'La Biblia está dada por la inspiración de Dios' de acuerdo con los hechos? ¿Está basado en las palabras de Dios? Estoy dispuesto a conversar con ustedes". Me atrajo de inmediato este post, y pensé para mí: ¿Es el punto de vista: "La Biblia está dada por la inspiración de Dios" no es cierto? ¿Cómo es esto posible? Inmediatamente publiqué un mensaje en el grupo, buscando esta pregunta. Pronto, respondió a mi publicación, y su respuesta fue la siguiente:

"¡Hola! En cuanto a ‘¿Toda la Escritura es dada por inspiración de Dios?’, Tengo tal entendimiento: Primero, tenemos que saber cuál es el trasfondo cuando Pablo dijo: ‘Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia’ (2 Timoteo 3:16). De acuerdo con los hechos históricos, podemos ver que cuando Pablo escribió cartas a la iglesia de Timoteo, solo existía el Antiguo Testamento. El Nuevo Testamento no había sido compilado en un libro, y solo se guardaban docenas de cartas en las iglesias. Así que la palabra de Pablo se refiere al Antiguo Testamento, porque los israelitas solo consideraban el Antiguo Testamento como la Biblia. El Nuevo Testamento surgió después de 300 de Cristo. En ese momento, los líderes de esas iglesias se reunieron. Pensaban que los últimos días estaban cerca, y debían recoger las palabras del Señor Jesús y las cartas de los apóstoles, recopilarlas en un libro, como el Antiguo Testamento, y repartirlo entre todas las iglesias. Entonces recogieron las cartas escritas por los discípulos y apóstoles del Señor Jesús. Finalmente, a través del estudio y la confirmación, seleccionaron 27 letras como el canon del Nuevo Testamento, y posteriormente las combinaron con el Antiguo Testamento para convertirse en el contenido completo de la Biblia. Así es como nacieron el Antiguo y el Nuevo Testamento".

Biblia,estudios biblicos,La Biblia

Después de leer la conclusión del hermano, pensé que tenía sentido. Nunca había tenido en cuenta el contexto de la palabra de Pablo e incluso consideré que toda la Biblia fue inspirada por Dios, como consecuencia de lo cual presté gran atención a todas las palabras en el Nuevo Testamento y las consideré como las palabras de Dios. No fue hasta entonces que me di cuenta de que "Toda la escritura se da por inspiración de Dios", dijo Pablo al referirse al Antiguo Testamento. Mientras meditaba, él había enviado otro pasaje:

"Además, incluso si es el Antiguo Testamento, no podemos decir que todo está inspirado por Dios. Al buscar en la Biblia, podemos ver que solo lo que Jehová instruyó a los profetas que dijera, y lo que se les pidió a los profetas que transmitieran, son las palabras de Dios. Además, Dios nunca dijo que toda la Biblia fue dada por inspiración de Él, no había tal palabra en los Profetas, el Señor nunca dijo esto, y los apóstoles nunca dijeron que sus cartas y testimonios provenían de la inspiración de Dios, y mucho menos se atrevían a decir que fueron palabras de Dios, éste es el hecho. Sin embargo, más tarde, todos los creyentes en Dios creen que el Antiguo y el Nuevo Testamento, aunque escritos por hombres, fueron dados por inspiración de Dios. Entonces, reflexionemos: ¿este conocimiento es real?

"De hecho no es real, porque no tiene la confirmación de las palabras de Dios, y mucho menos hay una base fáctica", respondí rápidamente. Posteriormente, él me respondió:

"'Toda la Escritura se da por inspiración de Dios' y 'Todas las palabras en la Biblia son todas las palabras de Dios' son nuestras opiniones humanas. Jesucristo dijo: ‘Examináis las Escrituras porque vosotros pensáis que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;’ (Juan 5:39). De las palabras del Señor, podemos ver que la Biblia es un testimonio de Dios y un registro de la obra de Dios, y dicho así es práctico. Cada paso de la obra de Dios va acompañado de la guerra entre Dios y las fuerzas malvadas de Satanás, y los registros en la Biblia se basan en la obra de Dios, así que no solo hay palabras de Dios en la Biblia, sino también las palabras de varias personas y de Satanás, que es un hecho que nadie puede negar. En la Biblia, aparte de la palabra de Jehová Dios y del Señor Jesús y las palabras que Dios reveló a los profetas, la mayoría del resto se puede categorizar como registros históricos y experiencias del hombre. Por lo tanto, el dicho 'Toda la Biblia se da por inspiración de Dios y todas las palabras de Dios' no es real. Si los humanos podemos exaltar a Dios y tener corazones reverentes a Dios, entonces nos será imposible tomar las palabras del hombre en la Biblia como las de Dios, y mucho menos considerar a las personas usadas por Dios como iguales de Dios. De lo contrario, ¿no es blasfemo para Dios?

A través de su comunicación, lo entendí más claramente en mi corazón. De hecho, independientemente del Antiguo Testamento o del Nuevo Testamento, la mayoría de los contenidos son ciertamente registros de la obra de Dios. En ellos están contenidas algunas palabras de Dios, que son solo una parte muy pequeña. En el resto de las palabras, algunas son las declaraciones de los eventos, algunas son palabras del hombre, algunas son de Satanás, etc. Si consideramos todas estas palabras como las palabras de Dios, ¿no son conceptos confusos o una comprensión absurda? Nosotros, los hombres, somos parte de la creación, ¿cómo podríamos compararnos con Dios? La naturaleza de este problema es tan grave... Al meditar, recibí de él otro pasaje de palabras, y esto me permitió comprender más claramente la gravedad de aferrarme a estas nociones.

Él dijo: "Si insistimos en que las palabras de los hombres son las de Dios, ¿qué consecuencia vendrá de tal acción? En realidad, todos podemos ver: todo el mundo religioso considera las palabras del hombre como las palabras de Dios. Como resultado, al dar sermones, comunicar o testificar, están citando las palabras del hombre cada vez más frecuentemente, pero las palabras de Dios cada vez son menos. Las palabras del hombre se ajustan a nuestras nociones e imaginaciones, por lo que todos preferimos aceptar y citar las palabras del hombre. Como resultado, todas las palabras de Dios han sido anuladas involuntariamente. ¿No es esta una manera de traicionar o resistir a Dios? ¿No es esta una manera de estar en enemistad con Dios? ¿No nos caemos por el malvado plan de Satanás? La naturaleza de este problema es tan grave. Jesucristo dijo: ‘Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí’ (Juan 14:6). De esto sabemos que las palabras de Dios son la verdad y la vida, y ¿qué hay del hombre? Obedecer las palabras de Dios nos permite entrar al reino de los cielos y obtener la vida eterna. ¿Podemos tener la vida eterna al aferrarnos a las palabras del hombre? Si abandonamos las palabras de Dios, ¿no significa que abandonamos la oportunidad de entrar en el reino de los cielos y ganar la vida eterna?"

Después de ver su respuesta, me sentí sorprendido: nunca pensé que fuera tan grave aferrarme a esta noción. Reflexionando cuidadosamente, descubrí que efectivamente era un hecho. Debido a que creemos que todas las palabras en la Biblia están dadas por inspiración de Dios, creemos que debemos tener en cuenta cada palabra de la Biblia y, naturalmente, prestar poca atención a las palabras de Dios cuando leemos la Biblia. Además, las palabras de Dios son más profundas, por lo que debemos pagar un precio mayor para practicarlas; mientras que las palabras del hombre son fáciles de entender y practicar, y están en línea con nuestras nociones, entonces, naturalmente, elegimos aferrarnos a las palabras del hombre. Tal como dijo Jesucristo: "No todo el que me dice: ‘Señor, Señor’, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos" (Mateo 7:21). Mientras Pablo decía, "que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás salvo; porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación" (Romanos 10:9-10). Entonces, de acuerdo con las palabras del Señor Jesús, solo siguiendo el camino de Dios podemos entrar al reino de los cielos y tener vida eterna, lo cual requiere que paguemos un gran precio y suframos mucho. Si bien, según las palabras de Pablo, podemos entrar en el reino de los cielos confiando únicamente en la gracia del Señor y no necesitamos pagar ningún precio. Naturalmente, elegimos aferrarnos a las palabras de Pablo, dejando de lado las palabras del Señor Jesús. No nos enfocamos en buscar la voluntad de Dios ni en cómo practicar los requisitos del Señor en nuestra vida. Ahora piénselo: el Señor es el Rey del reino de los cielos, y si no creemos en Dios basándonos en los requisitos del Señor Jesús, ¿podemos ser aprobados por Dios? Cuando llegue el momento de juzgar a los humanos con Sus palabras, de separar al hombre según su especie y de recompensar a los buenos y castigar a los malvados, descubriremos que a lo que nos aferramos no son las palabras de Dios, Sus requisitos de nosotros los humanos, y luego lloraremos, crujiremos los dientes y golpearemos nuestros pechos. Es tan terrible incluso pensar en esto.

En ese momento, no pude evitar suspirar de emoción: la comunión del hermano está bien fundada, y me hace tener un poco de discernimiento sobre las palabras "Toda la Escritura es inspirada por Dios". Ahora entendí que debía centrarme en las palabras de Dios cuando leo las Escrituras. Solo las palabras de Dios son la verdad, el camino y la vida, y son el único estándar para que entremos en el reino de los cielos. Incluso si con la inspiración y la iluminación del Espíritu Santo, conforme a la verdad y la voluntad de Dios, las palabras del hombre no pueden ser tratadas como las palabras de Dios y la verdad. Si solo nos enfocamos en escuchar las palabras del hombre pero no en practicar las palabras de Dios, somos propensos a caminar por nuestros propios caminos, e incluso podemos traicionar y resistir a Dios. Parece que necesito comunicar con aquellos que entienden la verdad si me encuentro en problemas que no entiendo...

 

Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.


¿Es la Biblia completamente la Palabra de Dios?

2019-12-15 23:31:50 | la Fuente de la Vida

Hermanos y hermanas de La Etapa Amorosa:

La Biblia es el canon del cristianismo, el fundamento de nuestra fe. Como creemos en el Señor, cada uno de nosotros ha tenido una Biblia. Leemos la Biblia con frecuencia y la valoramos como un tesoro. Además, tomamos aún más las palabras de la Biblia como el estándar más elevado en nuestra vida y trabajamos duro para seguir. Pablo dijo: "Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia" (2 Timoteo 3:16). Esto nos hace pensar aún más que todas las escrituras están inspiradas por Dios. Algunas personas dicen que en la Biblia están las palabras de Satanás y el asno hablando con Balaam. Obviamente, no son las palabras de Dios. ¿Puedo preguntar, las palabras en la Biblia no son todas las palabras de Dios? ¿Qué piensas de esta pregunta?

Aiguang

Leyendo un libro,estudiar la Biblia,estudios biblicos

Querido Aiguang:

Tu pregunta es muy buena. Recientemente, muchos hermanos y hermanas también nos preguntan sobre esta pregunta. Vamos a buscarlo juntos.

Muchos hermanos y hermanas creen en estas palabras dichas por Pablo. Sin embargo, primero debemos saber que las palabras de Pablo son solo palabras del hombre, pero no pueden representar las palabras de Dios. Hay sesenta y seis libros en toda la Biblia, pero ningún versículo pone que Dios dijo que toda la escritura está inspirada por Dios o que las palabras en la Biblia son todas las palabras de Dios. Dado que Dios no dijo eso, ¿la declaración de Pablo se ajusta a la palabra de Dios? ¿Hay palabras del Espíritu Santo como prueba? Si esta declaración de Pablo es corroborada por las palabras de Jesucristo o del Espíritu Santo, entonces debemos aceptar y obedecer eso. Esto está completamente en línea con las intenciones del Señor. No importa quién sea, siempre y cuando sus palabras no estén respaldadas por las palabras de Jesucrito o del Espíritu Santo, no podemos aceptarlas a ciegas. Nosotros los hombres somos solo hombres, somos seres creados. Entonces, nuestras palabras no pueden representar la voluntad del Creador. Jesucristo en quien creemos es el Señor del cielo. Solo practicando según las palabras de Dios podemos ser aprobados por Dios.

Todos sabemos muy claramente que Pablo solía resistir a Dios y oponerse a Jesucristo. Es un hecho comúnmente reconocido que él fue el cabecilla de la oposición contra la obra de Jesucristo. Aunque Jesucristo escogió a Pablo como un apóstol para difundir el evangelio, Pablo todavía es un ser creado. Por lo tanto, sus palabras son, sin duda, las palabras de un hombre. Jesucristo es Dios, mientras que todos los apóstoles y discípulos de Jesucristo son hombres. No se pueden comparar con Jesucristo mismo. Entonces, cuando se trata de las palabras del hombre, no podemos aceptarlas y obedecerlas a ciegas. Debemos buscar si están en línea con la voluntad de Dios, lo cual es crucial para que podamos entrar en el reino de los cielos.

¿Cuál es el trasfondo de Pablo que dijo las palabras "Toda la Escritura es dada por inspiración de Dios"?

Dado que las personas piensan que todas las Escrituras están inspiradas por Dios y que todas las palabras en la Biblia son las palabras de Dios según 2 Timoteo 3:16, primero investiguemos el trasfondo de Pablo diciendo estas palabras. Como todos sabemos, las palabras "Toda la escritura se da por inspiración de Dios" fueron dichas por Pablo cuando escribió cartas a Timoteo. Cuando escribió cartas, solo existió el Antiguo Testamento. El Nuevo Testamento era simplemente docenas de cartas guardadas en las iglesias y no habían sido compiladas en un libro. No fue sino hasta después de 300 d. C. que nació el Nuevo Testamento. Es decir, el Nuevo Testamento existió doscientos años después de que Pablo escribiera cartas. Se puede ver que el trasfondo de las palabras de Pablo se refiere al Antiguo Testamento.

Sin embargo, desde Moisés escribiendo Génesis al Señor Jesús viniendo a obrar, pasaron por lo menos 1000 años. Pablo no conocía a ninguno de los autores del Antiguo Testamento en absoluto. ¿Cómo podría saber que el Antiguo Testamento fue inspirado por Dios? No podía saberlo a menos que los autores del Antiguo Testamento le dijeran personalmente o el Antiguo Testamento dijera claramente: "La Biblia está inspirada por Dios". Pero esos autores no le dijeron eso y el Antiguo Testamento tampoco lo registra, que la Biblia fue inspirada por Dios, Entonces, lo que dijo Pablo no tiene base cierta.

Además, si decimos que la Biblia está completamente dada por la inspiración de Dios y que lo que está registrado en la Biblia son todas las palabras de Dios, entonces qué pasa con las palabras que la serpiente pronunció cuando tentó a Eva, las palabras dichas por Satanás cuando acusó a Job, las palabras que el asno le dijo a Balaam y las palabras de la banda de Coré. ¿Podemos decir que son las palabras de Dios? Hermanos y hermanas en el Señor todos saben: Satanás es el arcángel que traicionó a Dios y es el enemigo de Dios; el asno es un animal; mientras que la banda de Coré es la que resistió a Moisés y fue directamente destruida por Dios. Si insistimos en afirmar que sus palabras son las palabras de Dios, entonces estamos blasfemando a Dios. ¡Este es un problema serio en esencia! Por lo tanto, se puede ver que las palabras "Toda la Escritura se da por inspiración de Dios", dijo Pablo son su propia imaginación y no están en línea con la verdad.

¿Qué palabras en la Biblia son las palabras de Dios?

De hecho, todas las palabras habladas por Dios están claramente marcadas en la Biblia. Las palabras que Jehová Dios ha iluminado a los profetas están siempre marcadas con "Así dice el Señor de los ejércitos", "Así dijo el Señor", etc. Por ejemplo, Ezequiel 34:11: "Porque así dice el Señor Dios: He aquí, yo mismo buscaré mis ovejas y velaré por ellas". e Isaías 1: 2-3: "Oíd, cielos, y escucha, tierra, porque el Señor habla: Hijos crié y los hice crecer, mas ellos se han rebelado contra mí. El buey conoce a su dueño y el asno el pesebre de su amo; pero Israel no conoce, mi pueblo no tiene entendimiento". Estos muestran que los profetas transmitían las palabras de Dios y se hacían eco de las palabras que Dios había dicho personalmente. Las palabras del Señor Jesús están marcadas con "Jesús les dijo", "Jesús respondió y les dijo" y "Jesús dijo"; o las Escrituras nos dicen claramente que estas son las palabras que habló el Señor Jesús, como Mateo 4:19: "Y les dijo: Seguidme, y yo os haré pescadores de hombres". Mateo 5: 1-4: "Y cuando vio las multitudes, subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a El. Y abriendo su boca, les enseñaba, diciendo: Bienaventurados los pobres en espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados los que lloran, pues ellos serán consolados". y Mateo 18:22: "Jesús le dijo: No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete". Las palabras de Dios en Apocalipsis son también claramente marcadas con "dijo el Señor", "Y el que estaba sentado en el trono dijo", y así sucesivamente. Por ejemplo, Apocalipsis 1: 8: "Yo soy el Alfa y la Omega —dice el Señor Dios— el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso". y Apocalipsis 21: 5: "Y el que está sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y añadió: Escribe, porque estas palabras son fieles y verdaderas".

De estas escrituras podemos ver que en la Biblia solo las palabras de Jehová Dios, las palabras que Jehová habló a los profetas, las palabras dichas por el Señor Jesús mismo y las palabras que Dios reveló a Juan son las palabras de Dios; aparte de estas palabras, otras palabras son algunos hechos históricos o experiencias y conocimientos personales del hombre escritos por más de cuarenta autores. Aunque la mayoría de sus experiencias personales y conocimiento provienen de la iluminación del Espíritu Santo, no pueden equipararse a las palabras de Dios. Al igual que en el Antiguo Testamento, lo que la mayoría de las Escrituras documentan son algunos hechos históricos que Dios sí obró en la Era de la Ley; además, hay algunas palabras de Satanás, las palabras del asno, etc. En el Nuevo Testamento, aparte de las palabras de Dios citadas por varios autores, las palabras restantes son conocimiento, ideas y entendimientos del hombre, tales como las cartas de Pedro, Pablo y Timoteo. Sus letras solo representaban el trabajo del hombre y sus propias experiencias y conocimiento. Ellos escribieron para y ayudar y alentar a los hermanos y hermanas en las iglesias, lo cual no era lo que el Señor había dicho, sino estaba completamente fuera de la carga de la comisión del Señor. Además, nunca dijeron que sus palabras eran palabras de Dios y al comienzo de sus letras marcaron claramente su propio nombre. Esto es un hecho.

¿Cuál es la diferencia entre las palabras de Dios y las palabras del hombre?

Dios es el Creador y solo las palabras de Dios son la verdad, el camino y la vida; nosotros los humanos somos seres creados. Hay una diferencia sustancial entre el Creador y la creación. No se puede colocar en el mismo nivel y no se puede confundir entre sí. La obra de Dios y la palabra de Dios no pueden haber sido hechos por ningún hombre corrupto en lugar de Dios. En el transcurso de nosotros, los humanos que experimentamos la obra de Dios, no importa cuán grandes sean nuestras experiencias, entendimientos e iluminación del Espíritu Santo que beneficien a otras personas, no pueden ser tratadas como la palabra de Dios, sino que solo pueden usarse como referencia. Al igual que Pablo, Pedro y Mateo en ese momento, todos fueron utilizados por Dios, pero no fueron el Dios encarnado. Aunque sus cartas son beneficiosas y constructivas para los hermanos y hermanas en las iglesias, no se puede decir que sean las palabras del Espíritu Santo. ¡Esto es indudable! Las palabras de Dios son la expresión del carácter de Dios y todo lo que Él tiene y es. Son la realidad de las cosas positivas y pueden ser la vida del hombre. Las palabras pronunciadas por el hombre que se conforma con la verdad provienen todas de la experiencia del hombre y la comprensión de la palabra de Dios y la verdad, y todas representan la estatura del hombre en ese momento. Las palabras que se conforma con la verdad solo pueden brindarle a la gente un poco de ayuda y beneficio. No pueden ser la vida del hombre. Incluso con el esclarecimiento y la iluminación del Espíritu Santo, siguen siendo las palabras del hombre, y no se puede comparar con la palabra de Dios en absoluto.

A través de la comunicación anterior, creo que todos sabemos que la Biblia no está inspirada por Dios y que la Biblia no es enteramente la palabra de Dios. Cuando tomamos las palabras del hombre como las palabras de Dios, es lo mismo que tratar al hombre como a Dios. Esto está traicionando la verdad y blasfemando a Dios. Por lo tanto, no importa cuánto sufrimiento hayamos sufrido, Dios no reconocerá este tipo de fe en nosotros. Jesucristo claramente nos dijo: "No todo el que me dice: ‘Señor, Señor’, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos" (Mateo 7:21). Entonces, si nosotros, creyentes en el Señor, queremos ser aprobados por el Señor, debemos tratar correctamente la Biblia y no podemos adorarla a ciegas. Cuando lo leemos, también debemos diferenciar claramente entre las palabras de Dios y las palabras del hombre. No importa qué cosas nos sobrevengan, debemos buscar y practicar según las palabras de Dios, y las palabras del hombre solo pueden usarse como referencia. Si las palabras del hombre están de acuerdo con la verdad, entonces las aceptamos; si no, las rechazamos. Solo practicando la fe de esta manera podemos actuar de acuerdo con la intención de Dios.

Espero que la respuesta anterior pueda ser útil para ti.

Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.


¿puede conseguir realmente la salvación la fe basada en la Biblia?

2019-12-14 20:40:19 | la Fuente de la Vida

Versículos bíblicos como referencia:

Examináis las Escrituras porque vosotros pensáis que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí; y no queréis venir a mí para que tengáis vida (Juan5:39-40).

Biblia, estudios biblicos,pregunta acerca de la Biblia

La respuesta de la palabra de Dios:

Sólo ella puede salvar al hombre. La Biblia no puede salvar al hombre; no ha cambiado en absoluto durante varios miles de años y, si la adoras, nunca obtendrás la obra del Espíritu Santo.

de ‘Relativo a la Biblia (3)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Las personas han estudiado la Biblia durante todos estos años, han venido con muchas explicaciones, y realizado mucho trabajo; también tienen muchas opiniones diferentes acerca de ella, que debaten interminablemente, de manera que se han formado más de dos mil denominaciones hoy. Todos quieren encontrar algunas explicaciones especiales, o misterios más profundos en la Biblia, quieren explorarla, y encontrar en ella el trasfondo de la obra de Jehová en Israel, de la de Jesús en Judea, o más misterios que nadie más conoce. El acercamiento de las personas a la Biblia se produce por obsesión y fe, y nadie puede aclarar del todo la historia interna o la esencia de la misma. Así pues, el resultado es que las personas siguen teniendo hoy una sensación indescriptible de magia cuando se trata de la Biblia; aún más que eso, están obsesionadas con ella, y tienen fe en ella. Hoy en día, todos quieren encontrar las profecías de la obra de los últimos días en la Biblia, quieren descubrir qué obra hace Dios durante los últimos días y qué señales hay para los últimos días. De esta forma, su adoración de la Biblia se vuelve más ferviente, y mientras más se acercan los últimos días, más credibilidad dan a sus profecías, particularmente a las relativas a estos. Con esa creencia ciega en la Biblia, con esa confianza en ella, no tienen deseo de buscar la obra del Espíritu Santo. En las ideas de las personas, piensan que sólo ella puede traer la obra del Espíritu Santo; sólo en ella pueden encontrar los pasos de Dios; sólo en ella están escondidos los misterios de Su obra; sólo la Biblia —no otros libros o personas— puede clarificar todo lo de Dios y la totalidad de Su obra; la Biblia puede traer la obra del cielo a la tierra; y puede tanto comenzar como concluir las eras. Con estos conceptos, las personas no tienen inclinación a buscar la obra del Espíritu Santo. Así pues, independientemente de cuánta ayuda prestara la Biblia a las personas en el pasado, esta ha pasado a ser un obstáculo para la obra más reciente de Dios. Sin ella, las personas podrían buscar los pasos de Dios en cualquier otro lugar; pero hoy, la Biblia los ha contenido, y extender Su obra reciente ha pasado a ser doblemente difícil, y una ardua lucha. Todo esto se debe a los capítulos y los dichos famosos de la Biblia, así como sus diversas profecías. La Biblia se ha vuelto un ídolo en las mentes de las personas, un enigma en sus cerebros, y son simplemente incapaces de creer que Dios puede obrar excluyéndola, de creer que las personas pueden encontrar a Dios fuera de la Biblia, y mucho menos son capaces de creer que Dios podría apartarse de ella durante la obra final y comenzar de nuevo. Esto es impensable para las personas; no pueden creerlo ni imaginarlo. La Biblia se ha convertido en un gran obstáculo para que los hombres acepten la nueva obra de Dios, y ha dificultado su desarrollo.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

La Biblia es un libro histórico, y si hubieras comido y bebido el Antiguo Testamento durante la Era de la Gracia, si hubieras puesto en práctica lo exigido en la época del Antiguo Testamento en la Era de la Gracia, Jesús te habría rechazado y condenado; si hubieras aplicado el Antiguo Testamento a la obra de Jesús, habrías sido un fariseo. Si hoy pones juntos el Antiguo y el Nuevo Testamento para comerlos y beberlos, y practicar, el Dios de hoy te condenará; ¡habrás quedado atrás en la obra actual del Espíritu Santo! ¡Si comes el Antiguo y el Nuevo Testamento, estás fuera de la corriente del Espíritu Santo! […]

La obra realizada por Jesús durante la época del Nuevo Testamento abrió una nueva obra: Él no obraba según la del Antiguo Testamento, ni aplicaba las palabras habladas por Jehová del Antiguo Testamento. Él hacía Su propia obra, una más nueva y más elevada que la ley. Por eso dijo: “No penséis que he venido a destruir la ley o a los profetas; Yo no he venido a destruirla sino a hacer que se cumpla”. Así pues, de acuerdo con lo que Él cumplió, rompió con mucha doctrina. Llevaba a los discípulos a los campos de trigo a recoger y comer los granos. No guardaba el día de reposo y dijo: “El Hijo del Hombre es Señor incluso del día de reposo”. En esa época, según las normas de los israelitas, quienquiera que no guardase el día de reposo sería apedreado hasta la muerte. Sin embargo, Jesús nunca entró en el templo ni guardó el día de reposo, y Jehová no llevó a cabo Su obra durante la época del Antiguo Testamento. Por tanto, la obra realizada por Jesús sobrepasó la ley del Antiguo Testamento, era más elevada que esta y no concordaba con ella. Durante la Era de la Gracia, Jesús no obró según la ley del Antiguo Testamento, había desafiado esas doctrinas. Hoy sigue habiendo personas que se adhieren a la Biblia, y a la ley del Antiguo Testamento en particular, ¿no niega esto la obra de Jesús? Algunos dicen que la Biblia es un libro sagrado, que debe leerse, y algunos dicen que la obra de Dios debe sostenerse para siempre, que el Antiguo Testamento es el pacto de Dios con los israelitas, que no se puede prescindir de él, ¡y que el día de reposo siempre debe guardarse! ¿No son ridículos? ¿Por qué no guardaba Jesús el día de reposo? ¿Estaba pecando? ¿Quién puede ver a través de tales cosas? Independientemente de cómo leas la Biblia, será imposible conocer la obra de Dios usando los poderes de comprensión del hombre. No sólo no obtendrás un conocimiento puro de Dios, sino que tus ideas se volverán cada vez más atroces, de forma que empezarás a oponerte a Dios. De no ser por la encarnación de Dios hoy, las personas se perderían por sus propios conceptos, y morirían en medio del castigo de Dios.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Si deseas ver la obra de la Era de la Ley, y cómo siguieron los israelitas el camino de Jehová, debes leer el Antiguo Testamento; si deseas entender la obra de la Era de la Gracia, debes leer el Nuevo Testamento. ¿Pero cómo ves la obra de los últimos días? Debes aceptar el liderazgo del Dios de hoy, y entrar en la obra de hoy, porque esta es la nueva obra, y nadie la ha registrado anteriormente en la Biblia. Hoy, Dios se ha hecho carne y ha seleccionado a otros escogidos en China. Él obra en estas personas, continúa Su obra en la tierra, continúa la obra de la Era de la Gracia. La obra de hoy es una senda por la que el hombre nunca ha caminado, y que nadie ha visto nunca. Es una obra que nunca se ha hecho antes: es la obra más reciente de Dios en la tierra. Así pues, la obra que nunca se ha hecho antes no es historia, porque ahora es ahora, y aún no se ha convertido en pasado. Las personas no saben que Dios ha hecho una obra mayor y más nueva en la tierra, y fuera de Israel, que ya ha ido más allá del ámbito de este, así como de las predicciones de los profetas, que es una obra nueva y maravillosa fuera de las profecías, y una obra más nueva más allá de Israel, que las personas no pueden percibir ni imaginar. ¿Cómo podría contener la Biblia registros explícitos de tal obra? ¿Quién podría haber registrado cada pedazo de la obra de hoy, sin omisión, de antemano? ¿Quién podría registrar esta obra más poderosa y sabia que desafía a las convenciones del viejo libro enmohecido? La obra de hoy no es historia, y como tal, si deseas caminar por la nueva senda de hoy, debes salir de la Biblia, ir más allá de los libros de profecía o historia en ella. Sólo entonces serás capaz de caminar por la nueva senda apropiadamente, y sólo entonces serás capaz de entrar en la nueva esfera y en la nueva obra.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Si hay un camino más elevado, ¿por qué estudiar ese más bajo y obsoleto? Si hay declaraciones y una obra más nuevas, ¿por qué vivir entre relatos históricos? Las nuevas declaraciones pueden proveer para ti, lo que demuestra que esta es la nueva obra; los viejos relatos no pueden saciarte ni satisfacer tus necesidades actuales, y esto significa que son historia, y no la obra del aquí y ahora. El camino más elevado es la obra más nueva, y con ella, por muy alto que fuera el camino del pasado, sigue siendo la historia de las reflexiones de las personas; independientemente de su valor como referencia, sigue siendo el camino antiguo. Aunque se registra en el “libro sagrado”, el camino antiguo es historia; aunque no hay constancia del mismo en el “libro sagrado”, el nuevo camino es del aquí y el ahora. Este puede salvarte y cambiarte, porque es la obra del Espíritu Santo.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Aquellos que son controlados por los reglamentos, las letras y están encadenados por la historia, nunca podrán obtener la vida y nunca podrán obtener el camino perpetuo de la vida. Esto es así porque todo lo que tienen es agua turbia que ha estado estancada por miles de años en vez del agua de vida que fluye desde el trono. Aquellos que no reciben el agua de la vida siempre seguirán siendo cadáveres, juguetes de Satanás e hijos del infierno. ¿Cómo pueden, entonces, contemplar a Dios? Si sólo tratas de aferrarte al pasado, si sólo tratas de mantener las cosas como están quedándote quieto, y no tratas de cambiar el estado actual y descartar la historia, entonces, ¿no siempre estarás en contra de Dios? Los pasos de la obra de Dios son vastos y poderosos, como olas agitadas y fuertes truenos, pero te sientas y pasivamente esperas la destrucción, apegándote a tu locura y sin hacer nada. De esta manera, ¿cómo puedes ser considerado alguien que sigue los pasos del Cordero? ¿Cómo puedes justificar al Dios al que te aferras como un Dios que siempre es nuevo y nunca viejo? ¿Y cómo pueden las palabras de tus libros amarillentos llevarte a una nueva era? ¿Cómo pueden llevarte a buscar los pasos de la obra de Dios? ¿Y cómo pueden llevarte al cielo? Lo que sostienes en tus manos son las palabras que sólo pueden darte consuelo temporal, no las verdades que pueden darte la vida. Las escrituras que lees son eso que sólo pueden enriquecer tu lengua, no las filosofías que te ayudan a conocer la vida humana, y menos aun los caminos que te pueden llevar a la perfección. […] observes quién está obrando ahora, quién está llevando ahora a cabo la obra de salvar al hombre durante los últimos días. Si no lo haces, nunca obtendrás la verdad y nunca obtendrás la vida.

de ‘Sólo el Cristo de los últimos días le puede dar al hombre el camino de la vida eterna’ en “La Palabra manifestada en carne”

Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.


¿Cómo tomó forma la Biblia? ¿Qué tipo de libro es exactamente la Biblia?

2019-12-13 23:35:18 | Profecías Bíblicas

estudio de la Biblia,estudios biblicos,la Biblia y Dios

La respuesta de la palabra de Dios:

Las cosas registradas en el Antiguo Testamento son la obra de Jehová en Israel, y lo registrado en el Nuevo es la obra de Jesús durante la Era de la Gracia; documentan la obra realizada por Dios en dos eras distintas. El Antiguo Testamento documenta la obra de Dios durante la Era de la Ley, y por tanto el Antiguo Testamento es un libro histórico, mientras el Nuevo es el producto de la Era de la Gracia. Cuando comenzó la nueva obra, estos libros quedaron obsoletos; por tanto, el Nuevo Testamento también es un libro histórico. Por supuesto, no es tan sistemático como el Antiguo ni registra tantas cosas.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

En tiempos antiguos, antes de la Era de la Gracia, las personas leían la Biblia, pero en esa época sólo estaba el Antiguo Testamento; el Nuevo no existía. Como estaba el Antiguo Testamento de la Biblia, las personas empezaron a leer las santas Escrituras. Una vez que Jehová dejó de dirigirlo, Moisés escribió Génesis, Éxodo, y Deuteronomio… Recordó la obra de Jehová en ese momento, y la escribió. La Biblia es un libro de historia. Por supuesto, también contiene algunas de las predicciones de los profetas, y por supuesto, estas no son historia en absoluto. La Biblia incluye varias partes; no sólo hay profecía, o sólo la obra de Jehová, o las epístolas paulinas. Debes saber cuántas partes incluye; el Antiguo Testamento lo forman Génesis, Éxodo…, y también los libros de profecía que se escribieron. Finalmente, el Antiguo Testamento termina con el libro de Malaquías. Registra la obra de la Era de la Ley del Antiguo Testamento, dirigida por Jehová; desde Génesis hasta el libro de Malaquías, es un relato exhaustivo de toda la obra de la Era de la Ley. Es decir, el Antiguo Testamento registra todo lo experimentado por las personas que fueron guiadas por Jehová en la Era de la Ley. Durante la Era de la Ley del Antiguo Testamento, el gran número de profetas levantados por Jehová hablaron profecía en Su nombre, dieron instrucciones a diversas tribus y naciones, y predijeron la obra que Jehová haría. Este había dado el Espíritu de profecía a todas estas personas que había levantado: eran capaces de ver Sus visiones, oír Su voz; por tanto, estaban inspiradas por Él y escribían profecía. La obra que hacían era la expresión de la voz de Jehová, era la obra de profecía que hacían en Su nombre, y Su obra en ese momento era simplemente guiar a las personas usando el Espíritu; Él no se hizo carne, y las personas no vieron nada en Su rostro. Por tanto, levantó muchos profetas para hacer Su obra, y les dio oráculos que transmitieron a cada tribu y clan de Israel. Su obra era hablar profecía, y algunos de ellos escribieron las instrucciones de Jehová para mostrarlas a otros. Él levantó a estas personas para hablar profecía, predecir la obra del futuro o la que aún debía hacerse durante ese tiempo, de forma que las personas pudieran ver las maravillas y la sabiduría de Jehová. Estos libros de profecía eran bastante diferentes de los demás libros de la Biblia; eran palabras habladas o escritas por aquellos a los que se había dado el Espíritu de profecía; por aquellos que habían obtenido de Jehová las visiones o la voz. Aparte de los libros de profecía, todo lo demás en el Antiguo Testamento son registros hechos por personas después de que Jehová hubiera terminado Su obra. Estos libros no pueden reemplazar a las predicciones habladas por los profetas levantados por Jehová, del mismo modo que Génesis y Éxodo no pueden compararse con el libro de Isaías y el de Daniel. Las profecías se hablaron antes de que la obra se hubiera llevado a cabo; los otros libros, entretanto, se escribieron después de que hubiera terminado, que era lo que las personas eran capaces de hacer. Los profetas de esa época fueron inspirados por Jehová y hablaron algo de profecía, muchas palabras, y profetizaron las cosas de la Era de la Gracia, así como la destrucción del mundo en los últimos días: la obra que Jehová planeó hacer. Los libros restantes registran, todos, la obra realizada por Jehová en Israel. Por tanto, cuando lees la Biblia, estás leyendo principalmente acerca de lo que Él hizo en Israel; el Antiguo Testamento de la Biblia registra principalmente la obra de Jehová de guiar a Israel, Su uso de Moisés para llevar a los israelitas fuera de Egipto, quien los liberó de los grilletes de Faraón, y los llevó al desierto, tras lo cual entraron en Canaán y todo lo siguiente fue su vida allí. Todo lo demás son relatos de la obra de Jehová a lo largo y ancho de Israel. Todo lo registrado en el Antiguo Testamento es la obra de Jehová en Israel, la obra que Él llevó a cabo en la tierra en la que hizo a Adán y Eva. Desde el momento en que Dios comenzó oficialmente a guiar a las personas sobre la tierra después de Noé, todo lo registrado en el Antiguo Testamento es la obra de Israel. ¿Y por qué no se registra ninguna obra más allá de Israel? Porque esa tierra es la cuna de la humanidad. En el principio, no había otros países además de Israel, y Jehová no obró en ningún otro lugar. De esta forma, lo que se registra en la Biblia es puramente la obra en Israel en ese momento. Las palabras habladas por los profetas, por Isaías, Daniel, Jeremías, y Ezequiel… sus palabras predicen Su otra obra sobre la tierra, la obra de Jehová Dios mismo. Todo esto venía de Dios, era la obra del Espíritu Santo, y aparte de estos libros de los profetas, todo lo demás es un relato de las experiencias de la obra de Jehová por parte de las personas en ese momento.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

¿Qué tipo de libro es la Biblia? El antiguo pacto es la obra de Dios durante la Era de la Ley. El Antiguo Testamento de la Biblia registra toda la obra de Jehová durante dicha era y Su obra de creación. Todo él registra la obra realizada por Jehová, y acaba finalmente los relatos de la misma con el libro de Malaquías. El Antiguo Testamento registra dos partes de la obra realizada por Dios: una es la obra de la creación, y la otra es el decreto de la ley. Ambas fueron realizadas por Jehová. La Era de la Ley representa la obra de Dios bajo el nombre de Jehová. Es la totalidad de la obra realizada principalmente bajo el nombre de Jehová. Así pues, el Antiguo Testamento registra la obra de Jehová, y el Nuevo la de Jesús, llevada a cabo principalmente bajo este nombre. La mayor parte del sentido del nombre de Jesús y de la obra que Él hizo se registra en el Nuevo Testamento. En el tiempo del Antiguo Testamento, Jehová edificó el templo y el altar en Israel, guió la vida de los israelitas sobre la tierra, demostrando que eran Su pueblo escogido, el primer grupo de personas que seleccionó en la tierra y que estaban conformes a Su propio corazón, el primer grupo de personas que Él guió personalmente; es decir, las doce tribus de Israel fueron los primeros escogidos de Jehová, y por tanto Dios siempre obró en ellos, justo hasta el momento en que concluyó la obra de Jehová de la Era de la Ley. La segunda etapa de obra fue la de la Era de la Gracia del Nuevo Testamento, y se llevó a cabo en medio de la tribu de Judá, una de las doce de Israel. Que el ámbito de la obra fuera menor se debe a que Jesús era Dios hecho carne. Jesús sólo obró a lo largo y ancho de la tierra de Judea, y sólo hizo tres años y medio de obra; por tanto, lo que se registra en el Nuevo Testamento está lejos de poder superar la cantidad de obra registrado en el Antiguo. La obra de Jesús, en la Era de la Gracia, se registra principalmente en los Cuatro Evangelios. La senda por la que transitaron las personas de la Era de la Gracia era la de los cambios más superficiales en su carácter vital, la mayor parte de la cual queda recopilada en las epístolas.

de ‘Relativo a la Biblia (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

En aquella época, Él había hecho mucha obra incomprensible para Sus discípulos, sin proveer explicación alguna. Después de que se marchó Él, los discípulos comenzaron a predicar y obrar en todas partes; a causa de esa etapa de la obra, comenzaron a escribir las epístolas y los libros del evangelio. Los correspondientes al Nuevo Testamento se escribieron entre veinte y treinta años después de la crucifixión de Jesús. Antes, el pueblo de Israel sólo leía el Antiguo Testamento. Es decir, en la Era de la Gracia las personas leían el Antiguo Testamento. El Nuevo sólo apareció durante la Era de la Gracia. No existía cuando Jesús obraba; las personas registraron Su obra después de que resucitara y ascendiera. Sólo entonces se materializaron los Cuatro Evangelios y, además de estos, las epístolas de Pablo y Pedro, así como el libro de Apocalipsis. Sólo más de trescientos años después de que Jesús ascendiera al cielo, cuando generaciones posteriores recopilaron sus registros, se hizo realidad el Nuevo Testamento. Sólo después de que esta obra hubiera acabado se hizo realidad el Nuevo Testamento; no había existido previamente. Dios había hecho toda esa obra, el apóstol Pablo había hecho toda esa obra y, más tarde, las epístolas de Pablo y Pedro fueron combinadas, y la mayor visión registrada por Juan en la isla de Patmos fue colocada al final porque profetizaba la obra de los últimos días. Fueron arreglos hechos enteramente por generaciones posteriores, y son diferentes de las declaraciones de hoy. […] Puede decirse que lo que registraron fue acorde con su nivel de educación y calibre humano, que fueron las experiencias de los hombres, que cada uno tuvo sus propios medios de recopilar y conocer, y que cada registro era diferente. Por tanto, ¡si adoras la Biblia como si fuera Dios eres extremadamente ignorante y estúpido!

de ‘Relativo a la Biblia (3)’ en “La Palabra manifestada en carne”


Si tu creencia en Dios es verdadera, recibirás a menudo Su cuidado

2019-12-12 23:01:16 | la Fuente de la Vida

El cambio de intenciones por parte de Dios hacia las personas de Nínive no implicaba dudas o ambigüedad. Más bien, era una transformación desde la ira pura a la tolerancia pura. Esta es una revelación verdadera de la esencia de Dios. Dios nunca está indeciso o inseguro en Sus acciones; los principios y propósitos detrás de Sus actos son todos claros y transparentes, puros y perfectos, con absolutamente ninguna estratagema o artimaña entretejida dentro. En otras palabras, la esencia de Dios no contiene tinieblas o maldad. Dios se enojó con los ninivitas debido a que sus actos malvados habían llegado a Sus ojos; en ese momento Su ira derivaba de Su esencia. Sin embargo, cuando la ira de Dios desapareció y Él concedió Su tolerancia sobre el pueblo de Nínive una vez más, todo lo que Él reveló era aún Su propia esencia. La totalidad de este cambio era debida a un cambio en la actitud del hombre hacia Dios. Durante todo este período de tiempo, el carácter que no se puede ofender de Dios no cambió; la esencia tolerante de Dios no cambió; la esencia amorosa y misericordiosa de Dios no cambió. Cuando las personas cometen actos malvados y ofenden a Dios, Él traerá Su ira sobre ellas. Cuando las personas se arrepienten verdaderamente, el corazón de Dios cambiará, y Su ira cesará. Cuando las personas continúan oponiéndose tozudamente a Dios, Su furia no cesará; Su ira los presionará poco a poco hasta que sean destruidos. Esta es la esencia del carácter de Dios. Independientemente de si Dios está expresando ira o misericordia y benignidad, la conducta, el comportamiento y la actitud hacia Dios en las profundidades de su corazón dictan aquello que se expresa por medio de la revelación del carácter de Dios. Si Dios somete continuamente a una persona a Su ira, el corazón de esta persona se opone indudablemente a Dios. Como nunca se ha arrepentido verdaderamente, no ha inclinado su cabeza delante de Dios ni ha poseído una verdadera creencia en Dios, nunca ha obtenido la misericordia y tolerancia de Dios. Si uno recibe a menudo el cuidado de Dios y obtiene frecuentemente Su misericordia y tolerancia, entonces esta persona tiene indudablemente una verdadera creencia en Dios en su corazón, y este no se opone a Dios. A menudo se arrepiente verdaderamente delante de Dios; por tanto, aunque la disciplina de Dios desciende frecuentemente sobre esta persona, Su ira no lo hará.

el pueblo de ninive se arrepiente

Este breve relato permite a las personas ver el corazón de Dios, ver la realidad de Su esencia, ver que el enojo de Dios y el cambio de Su corazón no se producen sin causa. A pesar del marcado contraste que Dios manifestó cuando estaba airado y cuando cambió Su corazón, que hace que las personas crean que parece que hay una gran brecha o un gran contraste entre estos dos aspectos de la esencia de Dios —Su ira y Su tolerancia— la actitud de Dios hacia el arrepentimiento de los ninivitas permite una vez más a las personas ver otro lado del verdadero carácter de Dios. El cambio de opinión de Dios verdaderamente permite a la humanidad ver de nuevo la verdad de la misericordia y la benignidad de Dios y ver la verdadera revelación de la esencia de Dios. La humanidad no tiene sino que reconocer que la misericordia y la benignidad de Dios no son mitos, ni invenciones. Esto es debido a que el sentimiento de Dios en ese momento era cierto; el cambio de opinión de Dios era cierto; Dios concedió de hecho Su misericordia y tolerancia a la humanidad una vez más.

El arrepentimiento verdadero en los corazones de los ninivitas obtiene para ellos la misericordia de Dios y cambia su propio final

el pueblo de ninive se arrepiente obtener la misericordia de Dios

¿Había alguna contradicción entre el cambio de opinión de Dios y Su ira? ¡Por supuesto que no! Esto es debido a que la tolerancia de Dios en ese momento particular tenía su razón. ¿Qué razón podía ser? Es la que se da en la Biblia: “todos se arrepintieron de sus caminos de maldad” y “se despojaron de toda la violencia de sus manos”.

Este “camino de maldad” no se refiere a un puñado de actos malvados, sino a la fuente de mal detrás del comportamiento de las personas. “Arrepentirse de sus caminos de maldad” significa que aquellos en cuestión nunca cometerían estos actos de nuevo. En otras palabras, nunca se comportarán de esa forma malvada de nuevo; el método, la fuente, el propósito, la intención y el principio de sus acciones han cambiado todos; nunca más usarán esos métodos y principios para traer disfrute y felicidad a sus corazones. El “despojarse” en “despojarse de toda la violencia de sus manos” significa deponer o desechar, romper totalmente con el pasado y nunca volver atrás. Cuando el pueblo de Nínive abandonó la violencia que había en sus manos, esto demostraba y representaba su arrepentimiento verdadero. Dios observa los exteriores de las personas así como sus corazones. Cuando Dios observó el arrepentimiento verdadero en los corazones de los ninivitas sin dudarlo y también observó que habían dejado sus caminos malvados y abandonado la violencia que había en sus manos, cambió de opinión. Es decir, la conducta y el comportamiento de estas personas, sus diversas formas de hacer las cosas, así como su verdadera confesión y arrepentimiento de los pecados en su corazón, provocaron que Dios cambiase Su opinión, Sus intenciones, se retractase de Su decisión y no los castigase ni destruyese. Así pues, las personas de Nínive consiguieron un final diferente. Redimieron sus propias vidas y al mismo tiempo obtuvieron la misericordia y tolerancia de Dios, punto en el cual Dios también retrajo Su ira.

FuenteCaminando con Jesucristo

Recomendación: Devocionales Cristianos


El carácter justo del Creador es real y vívido

2019-12-11 22:40:39 | Reflexiones Cristianas

Palabras de Dios El carácter justo del Creador es real y vívido

La misericordia y tolerancia de Dios no son raras, el arrepentimiento del hombre lo es

Independientemente de cuán airado había estado con los ninivitas, tan pronto como declararon un ayuno y vistieron de cilicio y cenizas, Su corazón se ablandó gradualmente, y comenzó a cambiar Su opinión. Cuando Él les proclamó que destruiría su ciudad —el momento anterior a su confesión y arrepentimiento de sus pecados— Dios seguía airado con ellos. Una vez hubieron pasado por una serie de actos de arrepentimiento, el enojo de Dios por los habitantes de Nínive se transformó gradualmente en misericordia y tolerancia para ellos. No hay nada contradictorio acerca de la revelación coincidente de estos dos aspectos del carácter de Dios en el mismo acontecimiento. ¿Cómo debería uno entender y conocer esta ausencia de contradicción? Dios expresó y reveló sucesivamente estas esencias de los dos polos opuestos cuando el pueblo de Nínive se arrepintió, permitiendo a las personas ver la realidad de la esencia de Dios y que no se pueda ofender la misma. Dios utilizó Su actitud para decir a las personas: no es que Dios no tolere a las personas, o que no quiera mostrarles misericordia; es que ellas raramente se arrepienten verdaderamente hacia Dios, y es raro que las personas se vuelvan verdaderamente de sus malos caminos y abandonen la violencia de sus manos. En otras palabras, cuando Dios está airado con el hombre, espera que este sea capaz de arrepentirse sinceramente, y espera ver el arrepentimiento verdadero del hombre, en cuyo caso continuará concediendo entonces con liberalidad Su misericordia y tolerancia al hombre. Es decir, la conducta malvada del hombre provoca la ira de Dios, mientras que la misericordia y tolerancia de Dios se conceden a aquellos que escuchan a Dios y se arrepienten sinceramente delante de Él, a aquellos que pueden volverse de sus caminos malvados y abandonar la violencia de sus manos. La actitud de Dios se reveló muy claramente en Su trato con los ninivitas: la misericordia y la tolerancia de Dios no son en absoluto difíciles de conseguir. Él exige el arrepentimiento sincero de uno. Siempre y cuando las personas se vuelvan de sus caminos malvados y abandonen la violencia de sus manos, y abandonan la violencia de sus manos, Dios cambiará Su opinión y Su actitud hacia ellos.

El carácter justo del Creador es real y vívido

El carácter justo del Creador es real y vívido

Cuando Dios cambió Su opinión por las personas de Nínive, ¿fueron Su misericordia y tolerancia una fachada falsa? ¡Por supuesto que no! ¿Entonces qué te permite ver la transformación entre estos dos aspectos del carácter de Dios durante el mismo asunto? El carácter de Dios es un todo completo; no está en absoluto dividido. Independientemente de si Él está expresando enojo o misericordia y tolerancia hacia las personas, estas son todas expresiones de Su carácter justo. El carácter de Dios es real y vívido. Él cambia Sus pensamientos y actitudes de acuerdo al desarrollo de las cosas. La transformación de Su actitud hacia los ninivitas le dice a la humanidad que Él tiene Sus propios pensamientos e ideas; Él no es un robot ni una figura de arcilla, sino el propio Dios vivo. Él podía estar airado con los habitantes de Nínive, del mismo modo que podía perdonar sus pasados de acuerdo a sus actitudes; Él podía decidir traer desgracia sobre los ninivitas, y podía cambiar Su decisión debido a su arrepentimiento. Las personas prefieren aplicar mecánicamente las normas, y prefieren usarlas para establecer y definir a Dios, del mismo modo que prefieren usar fórmulas para conocer el carácter de Dios. Así pues, de acuerdo con el ámbito del pensamiento humano, Dios no piensa, ni tiene ideas sustanciales. En realidad, los pensamientos de Dios se transforman constantemente de acuerdo con los cambios en las cosas y los entornos; mientras estos pensamientos se están transformando, se revelarán diferentes aspectos de la esencia de Dios. Durante este proceso de transformación, en el momento en que Dios cambia Su opinión, revela a la humanidad la verdad de la existencia de Su vida, y revela que Su carácter justo es real y vívido. Además, Dios usa Sus propias revelaciones verdaderas para demostrar a la humanidad la certeza de la existencia de Su ira, Su misericordia, Su benignidad y Su tolerancia. Su esencia se revelará en cualquier momento y lugar según el desarrollo de las cosas. Él posee la ira de un león y la misericordia y la tolerancia de una madre. No se permite que nadie cuestione, viole, cambie o distorsione Su carácter justo. Entre todos los asuntos y las cosas, el carácter justo de Dios, es decir, la ira y la misericordia de Dios, pueden revelarse en cualquier momento y lugar. Él expresa de forma gráfica estos aspectos en cada rincón y grieta de la naturaleza y los lleva a cabo vívidamente en cada momento. El carácter justo de Dios no está limitado por el tiempo o el espacio, o en otras palabras, el carácter justo de Dios no se expresa o revela mecánicamente dictado por límites del tiempo o el espacio. En su lugar, el carácter justo de Dios se expresa y revela libremente en cualquier tiempo y lugar. Cuando ves a Dios cambia Su opinión y deja de expresar Su ira y refrenarse de destruir la ciudad de Nínive, ¿puedes decir que Dios solo es misericordioso y amoroso? ¿Puedes decir que la ira de Dios consiste en palabras vacías? Cuando Dios expresa una ira intensa y retrae Su misericordia, ¿puedes decir que no siente un amor verdadero hacia la humanidad? Dios expresa una ira intensa en respuesta a los actos malvados de las personas; Su ira es sin defecto. El corazón de Dios se conmueve por el arrepentimiento de las personas, y es este arrepentimiento el que cambia así Su corazón. El que sea conmovido, Su cambio de opinión así como Su misericordia y tolerancia hacia el hombre carecen totalmente de defectos; todo ello es limpio, puro, inmaculado y no está adulterado. La tolerancia de Dios es puramente tolerancia; Su misericordia es puramente misericordia. Su carácter revelará ira, así como misericordia y tolerancia, de acuerdo con el arrepentimiento del hombre y su conducta diferente. No importa lo que Él revele o exprese, todo es puro; todo es directo; Su esencia es distinta de la de cualquier cosa en la creación. Los principios de acciones que Dios expresa, Sus pensamientos e ideas o cualquier decisión particular, así como cualquier acción individual, están libres de cualquier defecto o mancha. Tal como Dios ha decidido, así actuará, y de esta manera Él completa Sus compromisos. Estas clases de resultados son precisos y perfectos porque su fuente es perfecta e intachable. La ira de Dios es perfecta. Del mismo modo, la misericordia y la tolerancia de Dios, que ninguna creación posee, son santas y perfectas, y pueden resistir la deliberación y la experiencia.

de "La Palabra manifestada en carne"

Recomendación: Caminando con Jesucristo


Los sentimientos sinceros del Creador hacia la humanidad

2019-12-10 21:59:16 | Reflexiones Cristianas

Sermón cristiano Los sentimientos sinceros del Creador hacia la humanidad

Las personas dicen frecuentemente que no es cosa fácil conocer a Dios. Sin embargo, Yo digo que conocer a Dios no es en absoluto un asunto difícil, porque Dios permite frecuentemente al hombre ser testigo de Sus hechos. Dios nunca ha suspendido Su diálogo con la humanidad; nunca se ha ocultado del hombre, ni se ha escondido. Sus pensamientos, ideas, palabras y hechos se revelan todos a la humanidad. Por tanto, mientras el hombre desee conocer a Dios, puede llegar a entenderlo y conocerlo a través de todo tipo de medios y métodos. La razón por la que el hombre piensa ciegamente que Dios lo ha evitado intencionadamente, que Dios se ha escondido intencionadamente de la humanidad, que Dios no tiene intención de permitir al hombre entenderlo y conocerlo, es que no conoce quién es Dios, ni desea entender a Dios; aún más, no le preocupan los pensamientos, las palabras o los hechos del Creador… Hablando sinceramente, si uno solo utiliza sus momentos de inactividad para centrarse en y entender las palabras o los hechos del Creador, y presta un poco de atención a los pensamientos del Creador y a la voz de Su corazón, no será difícil para ellos darse cuenta que los pensamientos, las palabras y los hechos del Creador son visibles y transparentes. De igual forma, hará falta un pequeño esfuerzo para ser consciente de que el Creador está en medio del hombre en todo momento, que Él siempre está en conversación con el hombre y la totalidad de la creación, y que está llevando a cabo nuevos hechos cada día. Su esencia y Su carácter se expresan en Su diálogo con el hombre; Sus pensamientos e ideas se revelan completamente en Sus hechos; Él acompaña y observa a la humanidad en todo momento. Habla tranquilamente a la humanidad y a toda la creación con Sus palabras silenciosas: Estoy por encima del universo, y estoy en medio de Mi creación. Me mantengo vigilante; estoy esperando; estoy a tu lado… Sus manos son cálidas y fuertes; Sus pasos son ligeros; Su voz es suave y elegante; Su forma pasa y se vuelve, abrazando a toda la humanidad; Su rostro es bello y amable. Él nunca se ha ido, ni ha desaparecido. Desde el amanecer hasta el anochecer, Él es el compañero continuo de la humanidad. Su cuidado fiel y afecto especial por la humanidad, así como Su preocupación y amor verdaderos por el hombre, se demostraron poco a poco cuando salvó la ciudad de Nínive. En particular, el diálogo entre Jehová Dios y Jonás dejó más al descubierto la misericordia del Creador por la humanidad que Él mismo creó. A través de estas palabras, puedes obtener un entendimiento profundo de los sentimientos sinceros de Dios por la humanidad…

Jonás (profeta)

 

Lo siguiente está registrado en el libro de Jonás 4:10-11: “Luego, Jehová le dijo: sientes pena por la enredadera que no has hecho ningún esfuerzo ni la has hecho crecer, que salió una noche y en una noche se secó. ¿No tendré Yo lástima de Nínive, esa gran ciudad, donde hay más de ciento veinte mil personas que no pueden ver la diferencia entre su mano izquierda y su derecha y donde también hay mucho ganado?” Estas son las palabras reales de Jehová Dios, una conversación entre Él y Jonás. Aunque este diálogo es breve, rebosa de preocupación del Creador por la humanidad y Su reticencia a renunciar a ella. Estas palabras expresan la verdadera actitud y los sentimientos que Dios tiene en Su corazón por Su creación, y con estas palabras claras, que raramente se oyen a los hombres, Dios declara Sus verdaderos propósitos para la humanidad. Este diálogo representa una actitud que Dios tuvo hacia el pueblo de Nínive, ¿pero qué clase de actitud es esta? Es la actitud que Él mantuvo hacia las personas de Nínive antes y después de su arrepentimiento. Dios trata a la humanidad de la misma manera. Dentro de estas palabras uno puede encontrar Sus pensamientos, así como Su carácter.

¿Qué pensamientos de Dios se revelan en estas palabras? Una lectura detenida revela inmediatamente que Él usa la palabra “lástima”; el uso de esta palabra muestra la verdadera actitud de Dios hacia la humanidad.

Desde una perspectiva semántica, uno puede interpretar la palabra “lástima” de diferentes formas: primero, amar y proteger, sentir ternura hacia algo; segundo, amar profundamente; finalmente, no estar dispuesto a herir y ser incapaz de soportar hacerlo. En resumen, implica un afecto y un amor tierno, así como una indisposición a abandonar a alguien o algo; significa la misericordia y la tolerancia de Dios hacia el hombre. Aunque Dios empleó una palabra comúnmente hablada entre los hombres, el uso de esta palabra pone al descubierto la voz del corazón de Dios y Su actitud hacia la humanidad.

Aunque la ciudad de Nínive estaba llena de personas tan corruptas, malvadas y violentas como las de Sodoma, su arrepentimiento causó que Dios cambiase Su opinión y decidiese no destruirlos. Debido a que su reacción a las palabras e instrucciones de Dios demostró una actitud en marcado contraste con la de los ciudadanos de Sodoma, y debido a su honesta sumisión a Dios y honesto arrepentimiento por sus pecados, así como su comportamiento verdadero y sincero en todos los sentidos, Dios demostró una vez más Su compasión sincera y se la concedió. La recompensa de Dios y Su compasión por la humanidad son imposibles de copiar por nadie; ninguna persona puede poseer la misericordia o la tolerancia de Dios, ni Sus sentimientos sinceros hacia la humanidad. ¿Hay alguien que tú consideras una gran persona, o incluso un superhombre, que, desde un punto elevado, hablando como una gran persona o sobre un punto supremo, haría esta clase de declaración a la humanidad o la creación? ¿Quién entre la humanidad puede conocer las condiciones de vida de la humanidad como la palma de sus manos? ¿Quién puede llevar una carga y responsabilidad por la existencia de la humanidad? ¿Quién es capaz de proclamar la destrucción de una ciudad? ¿Y quién es capaz de perdonar a una ciudad? ¿Quién puede decir que cuida de su propia creación? ¡Solo el Creador! Solo el Creador tiene compasión de esta humanidad. Solo el Creador muestra ternura y afecto a esta humanidad. Solo el Creador tiene un afecto sincero, inquebrantable por esta humanidad. De igual forma, solo el Creador puede conceder misericordia a esta humanidad y cuida de toda Su creación. Su corazón da un vuelco y duele con cada una de las acciones del hombre: Él se enoja, angustia y apena por el mal y la corrupción del hombre; Él está encantado, feliz, es clemente y está exultante por el arrepentimiento y la fe del hombre; cada uno de Sus pensamientos e ideas existe por y gira alrededor de la humanidad; lo que Él es y tiene se expresa totalmente por el bien de la humanidad; Su placer, Su ira, Su tristeza y Su felicidad, todo ello está entretejido con la existencia de la humanidad. Por el bien de la humanidad, Él viaja y se mueve; da en silencio cada pedazo de Su vida; dedica cada minuto y segundo de Su vida… Nunca ha sabido cómo tener compasión de Su propia vida, pero siempre ha tenido compasión y ha cuidado a la humanidad que Él mismo creó… Él da todo lo que tiene a esta humanidad… Otorga Su misericordia y tolerancia incondicionalmente y sin esperar una recompensa. Lo hace solo para que la humanidad pueda seguir sobreviviendo delante de Sus ojos, recibiendo Su provisión de vida; lo hace solo para que la humanidad pueda someterse a Él un día y reconocer que Él es aquel que nutre la existencia del hombre y provee la vida de toda la creación.

de «La Palabra manifestada en carne»

Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.

Fuente: Caminando con Jesucristo


El Creador expresa Sus sentimientos sinceros por la humanidad

2019-12-09 23:12:00 | Reflexiones Cristianas

Palabra de Dios El Creador expresa Sus sentimientos sinceros por la humanidad

Esta conversación entre Jehová Dios y Jonás es sin duda una expresión de los sentimientos sinceros del Creador por la humanidad. Por un lado comunica a las personas el entendimiento del Creador de toda la naturaleza bajo Su dominio; como Jehová Dios dijo: “¿No tendré Yo lástima de Nínive, esa gran ciudad, donde hay más de ciento veinte mil personas que no pueden ver la diferencia entre su mano izquierda y su derecha y donde también hay mucho ganado?”. En otras palabras, el entendimiento que Dios tenía de Nínive estaba lejos de ser superficial. Él no solo conocía el número de seres vivos en la ciudad (incluyendo a las personas y el ganado), también sabía cuántos no podían discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, es decir, cuántos niños y jóvenes estaban presentes. Esta es una prueba concreta del magnífico entendimiento que Dios tiene de la humanidad. Por otro lado, esta conversación informa a las personas de la actitud del Creador hacia la humanidad, es decir, del peso de la humanidad en el corazón del Creador. Es justo como Jehová Dios dijo: “sientes pena por la enredadera que no has hecho ningún esfuerzo ni la has hecho crecer, que salió una noche y en una noche se secó. ¿No tendré Yo lástima de Nínive, esa gran ciudad…?”. Estas son las palabras de reproche de Jehová Dios hacia Jonás, que son todas ciertas.

Jonás (profeta)

Aunque se le confió a Jonás la proclamación de las palabras de Jehová Dios a las personas de Nínive, él no entendió los propósitos de Jehová Dios, como tampoco Sus preocupaciones por los habitantes de la ciudad ni Sus expectativas para ellos. Con esta reprimenda Dios pretendía decirle que la humanidad era el producto de Sus propias manos, y Dios había puesto un empeño minucioso en cada persona; cada persona llevaba con ella las esperanzas de Dios; cada persona disfrutaba de la provisión de la vida de Dios; Dios había pagado un coste laborioso por cada persona. Esta reprimenda también dijo a Jonás que Dios valoraba a la humanidad, la obra de Sus propias manos, tanto como Jonás valoraba la calabacera. Dios no los abandonaría bajo ningún concepto fácilmente antes del último momento posible; además, había demasiados niños y ganado inocente en la ciudad. Cuando lidió con estos jóvenes e ignorantes productos de la creación de Dios, que ni siquiera podían distinguir su mano derecha de la izquierda, Dios fue incapaz de acabar con sus vidas y determinar sus consecuencias de una forma tan apresurada. Dios esperaba verlos crecer; esperaba que no caminasen por las mismas sendas que sus mayores, que no tuviesen que oír de nuevo la advertencia de Jehová Dios, y que diesen testimonio del pasado de Nínive. Más aún, Dios esperaba ver Nínive después de su arrepentimiento, de ver el futuro de Nínive tras su arrepentimiento, y lo más importante, ver Nínive una vez más bajo la misericordia de Dios. Por tanto, a los ojos de Dios, aquellos objetos de la creación que no podían distinguir entre sus manos derecha e izquierda eran el futuro de Nínive. Cargarían con el pasado despreciable de Nínive, del mismo modo que cargarían con la importante obligación de dar testimonio del pasado y el futuro de Nínive bajo la dirección de Dios. En esta declaración de Sus sinceros sentimientos, Jehová Dios presentó la misericordia del Creador por la humanidad en su totalidad. Mostró a la humanidad que “la misericordia del Creador” no es una expresión vacía, ni una promesa hueca; tiene principios, métodos y objetivos concretos. Él es verdadero y real, y no hay en Él falsedad ni disfraz, y de esta misma manera Su misericordia se concede incesantemente a la humanidad en cada momento y época. Sin embargo, hasta este mismo día, el diálogo del Creador con Jonás es la única y exclusiva declaración verbal de Dios de por qué muestra misericordia a la humanidad, cómo muestra misericordia a la humanidad, cuán tolerante es con la humanidad y Sus sentimientos sinceros por la humanidad. La conversación breve de Jehová Dios expresa todos Sus pensamientos para la humanidad; es una expresión sincera de la actitud de Su corazón hacia la humanidad, y también una prueba concreta de Su amplia concesión de misericordia sobre la humanidad. Él no concede Su misericordia solamente sobre las generaciones más ancianas de la humanidad; también la otorga a los miembros más jóvenes de la misma, como siempre ha sido, de una generación a la siguiente. Aunque la ira de Dios desciende frecuentemente sobre ciertos rincones y ciertas épocas de la humanidad, la misericordia de Dios nunca ha cesado. Con Su misericordia, Él guía y dirige a una generación de Su creación tras otra, provee y alimenta a una generación de la creación tras otra, porque Sus sentimientos sinceros hacia la humanidad nunca cambiarán. Del mismo modo que Jehová Dios dijo: “¿No tendré Yo lástima de Nínive…?”, Él siempre ha cuidado de Su propia creación. Esta es la misericordia del carácter justo del Creador, ¡y es también la singularidad pura del Creador!

de «La Palabra manifestada en carne»

Fuente: Caminando con Jesucristo

 

Conocer a Dios es el camino hacia el temer a Dios y apartarse del mal (Fragmento 1)

2019-12-08 23:11:28 | la Fuente de la Vida

Palabras de Dios dice: “‘Temer a Dios y apartarse del mal’ y conocer a Dios, están indivisiblemente conectados por miles de hilos, y la conexión entre ellos es evidente por sí sola. Si uno desea conseguir apartarse del mal, debe sentir primero un temor real de Dios; si uno desea conseguir un temor real de Dios, debe tener primero un conocimiento real de Dios; si uno desea conseguir el conocimiento de Dios, debe experimentar primero las palabras de Dios, entrar en la realidad de Sus palabras, experimentar Su reprensión y Su disciplina , Su castigo y juicio; si uno desea experimentar las palabras de Dios, debe encontrarse cara a cara con las palabras de Dios, encontrarse cara a cara con Dios, y pedirle que provea oportunidades para experimentar Sus palabras en la forma de todas las clases de entornos que impliquen a personas, acontecimientos, y objetos; si uno desea encontrarse cara a cara con Dios y con Sus palabras, debe poseer primero un corazón simple y sincero, la actitud a aceptar la verdad, la voluntad de resistir el sufrimiento, la determinación y la valentía de apartarse del mal, y la aspiración de convertirse en un ser creado genuino… De esta forma, yendo adelante paso a paso te acercarás cada vez más a Dios, tu corazón será cada vez más puro, y tu vida y el valor de estar vivo, junto a tu conocimiento de Dios, estarán cada vez más llenos de sentido y se expandirán cada vez más radiantes”.

Recomendación: Sermones cristianos